Soldado que murió de dos tiros en Zapala: quién era Pablo Córdoba y qué se sabe del caso
La muerte del soldado Pablo Córdoba sigue generando sospechas. Dos disparos en la cabeza descartaron la hipótesis de suicidio. Mientras la investigación avanza lentamente, la familia exige respuestas claras. Qué pasó y que se sabe hasta el momento.
La familia de Pablo Córdoba exige respuestas y justicia tras la muerte del soldado en Zapala. Foto Archivo.
La muerte de Pablo Córdoba, un joven soldado de 21 años en Zapala, sigue rodeada de dudas en Neuquén. Su familia, convencida de que se trató de un homicidio, se constituyó como querellante en el caso y exigió que se acelere la investigación. El joven presenta dos disparos en la cabeza, presuntamente de fusil FAL, por lo que su familia descarta la posibilidad de que se haya quitado la vida. Qué pasó.
La muerte de Pablo Córdoba no es un caso aislado en el Ejército. Su familia busca respuestas oficiales claras y generó una línea de investigación propia, mientras exige que la justicia federal avance rápidamente para esclarecer los hechos.
Soldado que murió de dos tiros en Zapala: quién era Pablo Córdoba
Pablo Jesús Gabriel Córdoba, de 21 años recién cumplidos, llevaba diez meses como soldado voluntario. Vivía en Zapala, practicaba voley, boxeo y según su mamá Natalia Uribe era dueño de unos ojos orgullosos. Le temblaba el mentón cuando decía una mentira pícara.
Daiana, su hermana, dice que le gustaba el trabajo. Planeaba ir al colegio militar para seguir la carrera de oficial.
Su papá, Juan José Córdoba, es suboficial y trabaja en la Base de Apoyo Logístico, al lado del Grupo de Artillería 16. Ambas forman la Guarnición Militar Zapala.
Soldado que murió de dos tiros en Zapala: qué pasó y cuáles son las sospechas la familia de Pablo Córdoba
El pasado jueves 1 de junio, el soldado Pablo Córdoba perdió la vida en circunstancias aún desconocidas mientras cumplía su servicio de guardia. A pesar de haber transcurrido más de un mes desde el trágico suceso, su familia todavía aguarda respuestas sobre lo ocurrido.
La madre del soldado, Natalia Uribe, reveló que desde que ingresó al hospital gravemente herido, supieron que tenía dos disparos en la cabeza por lo que descartaron la hipótesis del suicidio.
A pesar de las promesas de obtener prontamente los resultados de la autopsia, pasaron 25 días sin recibir información oficial. Solo les proporcionaron un informe médico que describe la ubicación de los dos disparos fatales que acabaron con la vida del joven soldado.
Según los datos aportados por la familia, uno de los proyectiles ingresó desde debajo del mentón en dirección ascendente, con salida en la frente, mientras que el otro impactó en la sien derecha y salió por la parte opuesta.
La familia también expresó su preocupación por la aparente falta de acción de los superiores de Córdoba en relación con la investigación en curso. Aunque el jefe del Grupo Artillería 16, donde prestaba servicio el soldado, se ofreció a acompañar y brindar apoyo a la familia, afirmaron que no recibieron interés real por parte de las autoridades en buscar la verdad.
«La querella tiene una línea de trabajo propia», aseguró el abogado, Maximiliano Orpianessi, quien representa a la familia de la víctima. «Lo investigamos como un homicidio», dijo.
Anticipó que entre otras medidas, pidieron un trabajo pericial que integre estudios balísticos, la autopsia y las declaraciones testimoniales.
Soldado que murió de dos tiros en Zapala: qué dijeron desde el Ejército
El teniente coronel Ignacio García Solorzano, señaló que el oficial a cargo y el soldado que iba a relevar a Córdoba fueron quienes encontraron el trágico escenario. Según sus declaraciones a Cadena Uno, «detectaron que se había quitado la vida con un fusil».
Hay otras versiones que lo contradicen. Algunos testigos dicen que fueron a buscar a Pablo Córdoba cuando escucharon las detonaciones, alrededor de las 6 de la mañana del 1 de junio. También mencionan que intentaron comunicarse con él por radio, y no respondió.
«Cuando las autoridades del Ejército toman conocimiento de lo sucedido, informan a la Policía Federal que encontraron un soldado voluntario que se había autoinflingido dos disparos de arma de fuego», había señalado Orpianessi, en RÍO NEGRO.
El viernes pasado declaró la persona que encontró a Córdoba, y luego otros dos soldados de guardia. En su declaración, la primera mencionó que el fusil estaba a 90 centímetros de distancia del cuerpo, y los otros declaran que el arma estaba arriba del cuerpo de Pablo. Estos datos aportados, fueron vistos como «totalmente contradictorios» por la familia del soldado.
La causa por la muerte de Pablo Córdoba está a cargo del juez federal Hugo Greca, quien subroga el Juzgado Federal de Zapala desde General Roca. Sin embargo, la familia manifestó su descontento con la lentitud del proceso, calificándolo como una «burla» y sintiéndose «engañados». Por esta razón, se constituyeron como querellantes para dar impulso a la investigación.
Recién el viernes, Greca iría desde Roca a Zapala para hacer una inspección ocular en el lugar del hecho: 36 días después.
Soldado que murió de dos tiros en Zapala: datos imprecisos y lo que falta esclarecer tras la muerte de Pablo Córdoba
Hasta ahora no se sabe si del fusil hallado junto al o sobre el cuerpo salieron los proyectiles que hirieron en la cabeza a Córdoba. Las balas tienen orificio de entrada y salida, y no habrían sido recuperadas para el cotejo.
El día del hecho encontraron una vaina servida, y diez días después otra, con un detector de metales.
El fusil no tenía el cargador puesto, según algunos testigos, y no lo revisó un perito balístico en el momento.
Ningún criminalístico intervino en la escena del hecho en las primeras y decisivas horas. Personal de la Policía Federal metió en bolsas todo lo que encontró, sin clasificar ni preservar la cadena de custodia, de acuerdo con lo que consta en las primeras actas.
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