La capital neuquina tiene niños mal nutridos

El Concejo Deliberante declaró la emergencia alimentaria. De acuerdo a un relevamiento de organizaciones sociales, de 500 chicos de hasta 16 que asisten a merenderos, la mitad está subalimentada o presenta índices de obesidad o sobrepeso.

El Deliberante declaró la emergencia alimenticia y nutricional por dos años, por lo que el Municipio deberá crear un programa específico que asegure una dieta mejor balanceada a los niños de escasos recursos que están bajo la órbita de los programas sociales de la comuna.

“Le estamos dando las herramientas al Municipio para que reajuste sus partidas presupuestarias y que revea la calidad de los alimentos que tienen asistencia directa de los comedores y merenderos”, dijo la concejala Cecilia Maletti, de Libres del Sur.

La autora de la ordenanza basó el planteo en un relevamiento de las organizaciones sociales. En una encuesta que involucró a unos 500 menores beneficiarios de planes, detectaron que más de la mitad de los niños de hasta 16 años que asisten a merenderos están en las variantes de la malnutrición o con importantes índices de obesidad o sobrepeso, con un bajo porcentaje de casos de desnutrición.

“Pedimos que el plan comer en casa sea más amplio para que los niños tengan otro tipo de alimentos, sabemos que los más baratos son las harinas, azúcares y grasas; y que los lácteos, verduras, huevos y carnes son más caros y quedan fuera del plan de alimentación. Todo esto hace que los chicos estén mal nutridos”, destacó la concejala.

El proyecto tuvo un extenso debate en comisión y demandó gran parte del año en consultas a funcionarias de Desarrollo Social, explicaciones por parte de las organizaciones sociales respecto al relevamiento realizado e inclusive análisis sobre el funcionamiento de áreas de Deporte y Cultura, en cuanto al acceso de los sectores más vulnerables a programas públicos.

La ordenanza tuvo el respaldo del arco opositor el jueves en el Deliberante y el rechazo de Cambiemos, que evaluó la medida como un acto de “politiquería”, según planteó el concejal Francisco Sánchez en la sesión.

Maletti insistió en la necesidad de que se readecuen las partidas presupuestarias “para que lo que llegue a los merenderos sea de ayuda” para las familias que reciben asistencia alimenticia del Estado municipal, logren una mejor nutrición.

“Todo el acompañamiento es bastante difícil, la organización Barrios de Pie está sacando un segundo informe este semestre y los números finales indicarían que la situación desmejoró, entonces es importante”, describió Maletti.

En su opinión, las organizaciones sociales que trabajan en los merenderos y en los barrios serán parte del contralor de que se cumpla la ordenanza que busca mejorar la calidad de la alimentación que se les da a las familias asistidas.

La ordenanza pasará ahora al Ejecutivo municipal para su promulgación, salvo que el intendente Horacio Quiroga decida vetarla. Si esto sucede regresa al recinto del Concejo Deliberante para su ratificación. Se deberán reunir dos tercios de los votos para que se convierte en ordenanza.

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789
millones de pesos de un presupuesto de 7.800 millones fueron destinados a Desarrollo Social.

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