No mejoró la situación del abogado enjuiciado

ROCA (AR).- Tres testigos propuestos por Julio Romero, el abogado penalista que está siendo juzgado por una presunta estafa con la venta de un camión y que asumió su propia defensa, declararon ayer durante la segunda audiencia de debate, aunque no aportaron datos de relevancia para el caso.

La investigación se inició tras la denuncia efectuada por Jorge Segura y su esposa Eva del Carmen Salamanca Mena, quienes tenían varias cuotas vencidas de un crédito que habían contraído para comprar un camión cero kilómetro.

Según los denunciantes, le fueron a pedir asesoramiento a Romero, pero éste les dijo que el rodado tenía pedido de secuestro. Días más tarde les avisó que tenía un posible comprador que se haría cargo de la deuda. El matrimonio le entregó el camión y los papeles al abogado, pero nunca recibieron el dinero de la venta ni tampoco recuperaron el vehículo. Luego supieron que el pedido de secuestro contra la unidad, nunca existió.

De los testigos de ayer, el primero en declarar fue el ex piloto de rally Ubaldo Lambrecht, quien afirmó que Segura era su mecánico, que debía varias cuotas del camión y que él lo llevó a verlo a Romero para gestionar una refinanciación de la deuda a través del abogado.

Ante una pregunta concreta del presidente de la Cámara Primera, Mario Bufi, respondió que no sabía si el camión tenía pedido de secuestro.

El segundo en declarar fue el transportista Mario Alberto Cano, quien conocía a Romero y que además vive en la misma cuadra que Segura y su mujer.

Señaló que Segura le consultó si Romero era buen abogado. «Le dije que a mi hermano le había recuperado dos camiones, por medio de la refinanciación de la deuda».

Finalmente fue el turno de Alejandra Brunetti, actual pareja del imputado Romero, aunque por abril de 2002, cuando habría ocurrido esta estafa, aseguró que estaban distanciados.

Señaló que una madrugada de «fines de abril de 2002», recibió un llamado de Gabriel Martín -sobre quien pesa un pedido de indagatoria- pidiendo hablar con Julio Romero. Aunque el ahora imputado no vivía con ella, aseguró que Martín le dijo que iba a la cordillera a vender un camión, pero que unas personas lo habían parado en la rotonda de Cipolletti donde había cargado combustible, y se habían llevado el camión. «Incluso se llevaron un bolso con las ropas y pertenencias de él (por Martín)». Con respecto a la relación entre Martín y Romero, la mujer dijo que «eran amigos».

El juicio continuará el miércoles próximo.