Otro caño pinchado para robar crudo

Río Negro

CERVANTES (AR).- Personal de seguridad de la empresa Oleoducto del Valle (Oldelval) detectó en la zona de la barda norte de la localidad de Cervantes una “pinchadura” en el ducto central que transporta crudo desde la cuenca Neuquina hasta Bahía Blanca.

Un depósito con capacidad para 163.000 metros cúbicos era utilizado por la banda de delincuentes para almacenar el petróleo y posteriormente trasladarlo a alguna refinería en otro punto del país.

Por ahora no hay detenidos, según la información brindada por personal de la Comisaría 22, de Cervantes, que participó de las primeras diligencias.

Al parecer y como suele suceder en este tipo de situaciones, el personal de Oldelval había detectado una baja en los niveles de transporte de petróleo que tienen como destino el puerto Rosales, en Bahía Blanca.

Es por eso que se decidió iniciar una investigación para determinar el lugar exacto donde se había efectuado la pinchadura del ducto.

No fue una tarea fácil porque la banda de delincuentes había realizado una tarea casi perfecta.

Primero “pincharon” el caño y conectaron una manguera de unos 7,5 centímetros de diámetro.

Por gravedad el petróleo iba a parar a unos 800 metros al sur del ducto, a un tanque de 36 metros de largo y 2,70 de ancho. Estaba cubierto con nylon y maderas. Una fina capa de tierra cubría la tremenda cisterna.

Por el buen estado de las mangueras y los caños, la Policía supone que la pinchadura es más o menos reciente.

Se sospecha que hasta allí llegaba un camión cisterna que cargaba el combustible y lo sacaba de la región del Alto Valle para trasladarlo a una refinería, señaló una fuente policial.

La pinchadura en el ducto también había sido camuflada con tierra y retamas de esa árida zona ubicada a unos 14 kilómetros al norte de Cervantes.

La denuncia fue radicada por el propio personal de Oldelval al juzgado de Instrucción 8, cargo de la jueza Margarita Carrasco y desde allí se ordenaron las primeras acciones junto al fiscal Ricardo Romera.

El comisario Pedro Garrido explicó ayer que por se iniciaron una serie de pericias pero que por el momento no hay indicios concretos de los autores del robo de combustible.

“Por las pericias que realizamos creemos que puede haber sido habilitada hace no más de un mes ya que el material (mangueras y caños) no habían sufrido oxidación o desgaste”, dijo el titular de la Comisaría 22.

Tras confirmarse la perforación al caño maestro ayer, pasadas las 8, personal de la empresa Oldelval llegó al lugar para cerrar la “pinchadura”.

Una decena de técnicos y empleados llegaron al lugar con maquinaria pesada para comenzar a trabajar en la reparación del ducto.

Es por eso que se montó un operativo para impedir el ingreso de los medios de comunicación que llegaron hasta esa zona para realizar la cobertura del hecho.

Oldelval tiene concesionado el conducto que lleva toda la producción de la cuenca Neuquina que no es procesada en las refinerías de la zona.

Con punto de carga en la zona de Medanito, cerca de Catriel, el caño que transporta lo que en la jerga se llama la “sopa” atraviesa los valles superiores del río Negro.

No es la primera vez que se detecta un robo de crudo de este tipo. Lo que la Justicia y la Policía no han podido determinar es en qué refinería termina procesándose el petróleo robado.