Pese a la autorización fueron pocos los actos de egresados en Neuquén

El complejo protocolo hizo que muchas instituciones eligieran otra forma de festejar los fines de ciclo.

En noviembre, el gobernador Omar Gutiérrez anunció que se podrían realizar actos de egresados. Una semana después se conoció el estricto protocolo que debían cumplir las instituciones que quisieran hacer actos presenciales. Además, hace algunas semanas el gobernador alargó el plazo y así los actos están permitidos hasta el 23. Sin embargo, fueron pocas las escuelas que optaron por la modalidad presencial. El delivery de títulos y las caravanas fueron la opción para hacer de los egresos un día especial pese a la pandemia.

Según datos oficiales Neuquén tiene 547 establecimientos de educación primaria y secundaria, en sus diferentes modalidades. Desde el ministerio de Educación señalaron que no hay datos de cuántas instituciones hicieron o harán actos presenciales ya que las escuelas no debían ni avisar, ni gestionar ningún tipo de autorización para realizar los egresos, sólo debían respetar el protocolo. Sin embargo, desde la comunidad educativa se pudo relevar que fueron pocas las instituciones que decidieron celebrar actos protocolados.

En líneas generales, el reglamento para las colaciones presenciales señala que los actos deben ser al aire libre, con una cantidad limitada de personas y que, en todo momento, se debe guardar el distanciamiento de dos metros, así como se debe usar barbijo correctamente colocado durante todo el encuentro. También restinge la participación de los mismos a personas dentro de los grupos de riesgo ante el coronavirus y establece tiempos máximos de duración así como toma de temperatura y la disposición de elementos de bioseguridad.

El protocolo es exhautivo, claro, es necesario para evitar contagios. Pero para muchas escuelas fue impracticable, ya que no disponían ni de fondos, ni de personal para llevarlos a cabo. Desde una institución pública de nivel medio, por ejemplo, informaron a las familias que la imposibilidad de realizar el acto de colación no respondía a falta de voluntad sino a dificultades administrativas, organizativas y económicas.

«Los auxiliares de servicio de educación no son contemplados en ese   permiso (el que rige para que los docentes puedan ingresar a los colegios) por lo que no se los puede convocar a su lugar de trabajo, por lo que la escuela sigue sucia y sin desinfección, con oficinas y baños sucios desde hace 9 meses», señala el texto.

Además, el personal de la escuela explica que «no estamos capacitados, ni fuimos preparados para realizar tareas de agentes de salud como controlar la temperatura o hacer cumplir los protocolos que sugieren para dichos actos».

Y desde lo económico la comunicación señala que el «distrito regional VIII, solamente nos entregó un cheque de $10.000 en el mes de febrero para Gastos de Mantenimiento y luego se suspendieron todas las partidas económicas. Para todo el trabajo diario cada agente está utilizando sus recursos propios», con lo cual sería imposible pensar en afrontar los gastos que el protocolo exige.

En este sentido, también hay instituciones que señalaron que desde el Consejo Provincial de Educación no se enviaron los diplomas para los egresados y que se les anunció que recién llegarían en febrero. Es así que cada escuela que quisiera entregar diplomas provisorios en un acto, debería confeccionarlos con fondos propios, que son escasos por las faltas de partidas. Es así que en algunos casos esos fondos salieron de lo poco que pudieron recaudar las escuelas en kioscos o cooperativas durante los días de clases presenciales o bien de bolsillos propios de la comunidad educativa.

«Es una lástima que nuestros gobernantes desconozcan la realidad de las escuelas públicas y nos enfrenten a los chicos y la comunidad. Estos anuncios solo generan más desigualdad entre escuelas. Los actos solo pueden ser realizados por las instituciones que cuentan con gimnasios, patios o jardines, porteros y recursos económicos propios», cierra, a modo de reflexión, el texto de una de las escuelas secundarias de Neuquén capital que no realizó su acto de forma presencial.

En muchos casos, la voluntad de maestros y directivos igual se hizo notar, como a lo largo de todo el año. Fueron varias las escuelas que a falta de colaciones presenciales hicieron una especie de delivery de títulos, donde visitaron casa por casa de los egresados para entregarles el diploma de fin de curso. También muchas familias y escuelas organizaron caravanas para festejar ese momento especial, pero guardando la distancia y los cuidados necesarios en tiempos en los que la pandemia no terminó.



En Plottier, la intendenta Gloria Ruiz apoyó la realización de las colaciones de forma presencial desde el minuto cero. Se reunió con directivos de las instituciones y ofreció personal municipal y espacios de la comuna para la aplicación del protocolo provincial. Sin embargo, los actos también fueron escasos. Es que el miedo y las complicaciones detuvieron a algunas escuelas.

De las 20 escuelas primarias y secundarias públicas que hay en ejido de Plottier, sólo ocho de ellas decidieron realizar sus actos de fin de ciclo y pidieron colaboración al Municipio. Hasta el momento, se concretaron dos de esas colaciones y se celebrarán en estos días las seis restantes.

En la quese realizó este lunes, el tiempo jugó una mala pasada para realizar el acto al aire libre en la Camping Nepen Hue, como estaba previsto. Es por eso que Ruiz decidió que el festejo se trasladara a un lugar cerrado de grandes dimensiones como el Gimnasio Municipal.

La intendenta se acercó a la celebración y compartió con los chicos una torta, además de obsequiarles un presente para el comienzo de su nueva etapa. «Sigan soñando, nunca bajen los brazos. Continúen con sus sueños a pesar de las adversidades, les deseo lo mejor«, les dijo Ruíz a los pequeños egresados de la escuela primaria 240.

Hoy fue el turno de la Escuela Provincial de Educación Técnica 9 que se sumó a las instituciones que eligieron las inmediaciones de la Casa Dr. Plottier para realizar su egreso. Allí, como en el resto de los actos de colación de escuelas de la ciudad, el municipio aportó no sólo el espacio sino el personal municipal de distintas direcciones y secretarias para el cumplimiento de las medidas sanitarias. Así como también aportó sonido, locución, zona de sanitarios, control de estacionamiento y de ingreso con toma de temperatura y alcohol como sanitizante.


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