El peronismo se reordena en Buenos Aires: Kicillof, Massa y Máximo Kirchner negocian una fórmula unificada

A contrarreloj, los tres referentes del peronismo bonaerense se reunieron en la gobernación para cerrar un acuerdo de unidad.

En medio de un clima de hermetismo y con el tiempo en contra, Axel Kicillof, Sergio Massa y Máximo Kirchner encabezaron este martes una nueva cumbre en la gobernación bonaerense para avanzar en un acuerdo electoral conjunto. A tan solo 24 horas del vencimiento del plazo para inscribir frentes, los tres referentes intentan sellar una alianza única que les permita competir bajo un mismo paraguas político en las próximas elecciones del 7 de septiembre.

La reunión se desarrolló, como la del día anterior, sin presencia de asesores ni dirigentes intermedios. El objetivo: afinar los términos de un frente común que unifique al peronismo bonaerense y coordinar las reglas de juego internas. Si bien hay avances en puntos clave, aún restan definiciones en la distribución de candidaturas, especialmente en los municipios que hoy están en manos de la oposición, informó el medio Infobae.

Uno de los avances más relevantes fue el diseño de un reglamento interno para el funcionamiento del frente. Según pudo reconstruir Infobae, este contempla la figura de «apoderados cruzados» como condición central. Esto implica que cada resolución que emita la junta electoral del nuevo espacio deberá contar con el acuerdo de los tres sectores: el kirchnerismo, el Frente Renovador y el Movimiento Derecho al Futuro (MDF), el espacio que responde al gobernador Kicillof.

Este martes por la tarde, representantes de las distintas fuerzas se reunieron en la oficina de la secretaria general del Gobierno, Agustina Vila, para definir detalles logísticos y avanzar en la redacción del reglamento. Entre los presentes estuvieron Facundo Tignanelli (PJ), Eduardo Cernul (Frente Renovador) y la propia Vila (MDF).


El acuerdo contempla una representación equitativa entre el kirchnerismo, el massismo y el espacio de Kicillof


El frente incluirá al Partido Justicialista, el Frente Renovador, Nuevo Encuentro, Kolina, el Frente Grande, Unidad Popular y agrupaciones distritales. La composición apunta a ser amplia y transversal, con representación tripartita en los órganos de decisión.

La idea de los «apoderados cruzados» ya se había debatido en el congreso del PJ bonaerense celebrado días atrás en Merlo, donde se acordó replicar ese esquema en el nuevo frente. Allí se estableció que por el PJ actuarán la intendenta de Moreno, Mariel Fernández, y el jefe comunal de Lomas de Zamora, Federico Otermín; mientras que por el MDF lo harán la vicegobernadora Verónica Magario y el ministro Gabriel Katopodis, dejando en claro la integración de Kicillof en la estructura formal del partido.

El gobernador, que hasta hace poco se mantenía al margen de las negociaciones, se involucró de lleno en los últimos días, buscando garantizar un cierre ordenado y evitar fugas. La posibilidad de que el MDF ensaye una alianza alternativa sigue latente como carta de presión, aunque por ahora prima la voluntad de converger en un solo espacio.

En paralelo, el mandatario bonaerense dio señales de inicio de campaña durante un acto en Pilar, al inaugurar una nueva escuela secundaria. «Lo que tenemos que decidir es si queremos una Provincia con con más escuela pública, con más trabajo, con más producción, con más inclusión social o, por el contrario, queremos que todo se caiga, se pierda y todo se abandone», dijo, marcando el tono del debate electoral que se avecina.

Un tema que preocupa a varios sectores del oficialismo es la definición de la Junta Electoral respecto al diseño de las boletas. Se espera que estas tengan color e incluyan las fotos de hasta dos candidatos, un formato que podría favorecer a La Libertad Avanza, que competirá con boleta violeta. Desde el kirchnerismo advierten que eso podría complicar la competitividad del nuevo frente peronista.