15 min cronometro

Descubrí cómo hacer flan sin huevo en 4 pasos: receta fácil y deliciosa

Si tenés ganas de hacer flan, pero no tenés intenciones de prender el horno, esta opción te va a encantar. Mismo resultado y sabor exponencial. ¡A disfrutar!

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15 min cronometro

Descubrí cómo hacer flan sin huevo en 4 pasos: receta fácil y deliciosa

Si tenés ganas de hacer flan, pero no tenés intenciones de prender el horno, esta opción te va a encantar. Mismo resultado y sabor exponencial. ¡A disfrutar!

Lista de Ingredientes

Leche: 1 litro

Fécula de maíz (o Maicena): media taza

Azúcar: media taza

Esencia de vainilla: 1 cucharadita

Caramelo líquido: 1 taza

El flan es un clásico manjar delicioso, por eso esta versión sin huevo y sin horno puede ser una opción fácil para hacer en casa, con algunos ingredientes que seguro tenés en la alacena. Tomá nota de esta receta, que te va a salir genial.


Cómo hacer flan sin huevo y sin horno: la fácil receta en cuatro pasos


  • Paso 1.
    En una olla a fuego medio calentá la leche, sin que este ingrediente se hierva.
    En otro recipiente, en simultáneo, mezclá la fécula de maíz o maicena con el azúcar.
  • Paso 2.
    Agregá esta mezcla a la leche caliente y, sin dejar de resolver, cociná hasta que la preparación se espese y empiece a parecer una crema.
    Retirá la preparación del fuego y agregá la esencia de vainilla.
  • Paso 3.
    Verté el caramelo, hecho previamente, en el fondo de una flanera o molde para el flan.
    Añadí la crema de maicena y con una espátula alisá la superficie.
  • Paso 4.
    Llevá la preparación a la heladera, y dejala que se enfríe por unas cuatro horas.
    Una vez pasado ese tiempo, ya podés desmoldar el flan. Hacelo con cuidado, para evitar que se rompa.

¡Un éxito asegurado!


Cómo hacer flan sin huevo y sin horno: opciones para mejorarle el sabor


Si la esencia de vainilla no te convence para darle sabor a este flan sin huevo y sin horno, podés probar con:

  • Esencia de coco o de otra fruta.
  • Leche saborizada para hacer la mezcla.
  • Cambiar el azúcar por dulce de leche.
  • Bañar el postre con algún licor cremoso, en vez de ponerle caramelo.

¡A probar!


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