La descabellada teoría que aseguraba que Lady Di y Carlos III tenían una hija mujer

Las teorías conspirativas, que suman hijos no reconocidos, rondan a la Familia Real desde hace muchos años. Una fallida publicación de "The Globe" hace siete años creó el falso mito de una nueva posible heredera.

La Corona Británica no gana para disgustos. Es que, tras la muerte de la Reina Isabel II en septiembre último, volvieron a primera plana las teorías conspirativas alrededor de una familia por demás observada y admirada alrededor del mundo.

En las últimas semanas, volvió a surgir una historia que señala que Lady Di y Carlos podrían tener una desconocida hija mujer, nacida como fruto de un tratamiento in vitro antes de que ambos contrajeran matrimonio. La historia fue, finalmente, echada por tierra tal su nivel de delirio.

La anécdota nos lleva a abril de 2015, cuando la revista «The Globe» habló de la supuesta hija de los príncipes. La gestación de la niña se habría dado cuando se anunció el compromiso de Diana y el actual Rey, quienes accedieron a análisis médicos para determinar si la pareja era fértil.

En ese contexto, los médicos de la familia real extrajeron óvulos de la princesa Diana y los fertilizaron con esperma del príncipe Carlos, a mediados de 1981 y meses antes de que ellos se casaran oficialmente.

De esos óvulos fertilizados, uno habría sido robado por un doctor que se lo habría implantado a su esposa, en secreto, a pesar de que debía destruirlos. Nueve meses después, habría nacido una niña que llevaría el nombre Sarah.

Para darle más veracidad a la historia, «The Globe» sumó una imagen de la supuesta hija de Diana. Además, el medio había reconstruido que la chica se enteró de su identidad cuando la princesa murió en un accidente y habría adoptado otra para evitar ser hallada.


Sarah Spencer: el nacimiento de un mito


A pesar de que la historia dio la vuelta al mundo, la teoría de «The Globe» fue rápidamente desmentida. Es que Michel Thorton, experto en temas de la realeza, demostró que la supuesta imagen de Sarah Spencer era falsa y se trataba de un fotomontaje con el rostro de Diana.

Además, se descubrió que la historia estaba basada en la novela «La desaparición de Olivia» escrita en 2011 por Nancy E. Ryan, que narra el devenir de la ficticia Olivia Franklin, una pediatra admiradora de Lady Di que quiere parecerse a ella y, de repente, descubre que es la hija secreta de la fallecida princesa.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios