Victoria Villarruel fue abucheada al salir de la misa en homenaje al Papa Francisco
La ceremonia, encabezada por el arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, buscaba ser un espacio “anti grieta” con la presencia de representantes políticos de diversos partidos, como el candidato a legislador Leandro Santoro, el premio Nobel Adolfo Pérez Esquivel y la diputada María Eugenia Vidal.
Victoria Villarruel abucheada en la misa por el Papa Francisco.
La vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, fue abucheada e insultada por un grupo de personas al retirarse de la misa en homenaje al Papa Francisco, celebrada este lunes en la Basílica de San José de Flores, en el barrio porteño donde Jorge Mario Bergoglio nació, se crió y descubrió su vocación religiosa. La ceremonia, encabezada por el arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, buscaba ser un espacio “anti grieta” con la presencia de representantes políticos de diversos partidos, como el candidato a legislador Leandro Santoro, el premio Nobel Adolfo Pérez Esquivel y la diputada María Eugenia Vidal. Sin embargo, el clima de unidad se vio empañado al final del evento.
Abuchearon a Victoria Villarruel cuando se retiraba de la misa por el Papa Francisco
Mientras Villarruel ingresó a la basílica sin incidentes y expresó su intención de “acompañar a los católicos y al pueblo argentino en el dolor por la pérdida de nuestro santo padre”, su salida estuvo marcada por fuertes abucheos y cánticos con tintes políticos.
Un grupo de personas apostadas en las escalinatas de la iglesia entonó: “Olé olé, olé olá, como a los nazis les va a pasar, a donde vayan los iremos a buscar”, mientras la vicepresidenta se retiraba en medio de un fuerte operativo de seguridad y evitaba hacer declaraciones a la prensa. “Con Santoro no hicieron lo mismo”, comentó una movilera de TN, destacando la diferencia en el trato recibido por otros asistentes.
La misa, que reunió a cientos de fieles conmovidos por el fallecimiento de Francisco, se llevó a cabo en un lugar de gran simbolismo: la iglesia donde Bergoglio tuvo la revelación que lo llevó a convertirse en sacerdote. Pese al mensaje de esperanza y unidad promovido por García Cuerva, quien destacó que “la vida de Francisco sigue siendo una luz en medio de la oscuridad”, el episodio de los abucheos a Villarruel reflejó las tensiones políticas que persisten incluso en momentos de duelo colectivo.
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