San Martín trabaja en la implementación del plan «Comer en Casa» 03-02-04

SAN MARTIN DE LOS ANDES (ASM).- El municipio local trabaja en la implementación del plan «Comer en Casa», que apunta a multiplicar la ayuda social en el seno de los hogares carenciados, al tiempo de reconstituir lazos familiares y fortalecer el aporte nutricional para la niñez.

El anuncio de la secretaria municipal de Acción Social, Haydée Giraudi, tiene por contexto un informe publicado ayer por este diario, sobre una alarmante detección de casos de déficit nutricional, relevados por el Consejo de la Comunidad para la Niñez, la Adolescencia y la Familia de San Martín de los Andes.

Según ese trabajo, el 20 por ciento de los niños que cursaron el segundo grado de las escuelas públicas en 2003 presentaba signos de inadecuada alimentación. El indicador más acuciante se obtuvo en la escuela 89, ubicada al pie del cerro Curruhuinca, donde los problemas de alimentación alcanzaron picos de hasta el 37 por ciento de la población escolar en todos los niveles.

Giraudi, quien también participa del consejo, dijo que el informe «no nos ha sorprendido y, de hecho, la reversión de esta problemática es una de las prioridades que se fijó el nuevo gobierno municipal», que asumió funciones el pasado 10 de diciembre encabezado por el peronista Jorge Carro.

En ese sentido, Giraudi explicó que los casos detectados «son la consecuencia natural del deterioro progresivo de los sectores más desprotegidos, agravado por la fuerte crisis que vivió el país. Por eso -continuó- estamos trabajando con distintas ONGs y en el marco de los lineamientos del plan nacional El Hambre más Urgente, para implementar en nuestra ciudad un programa que hemos denominado Comer en Casa, que apunta al mismo tiempo a reforzar el aporte nutricional y a recuperar los lazos familiares en torno de la mesa familiar».

En esta ciudad funcionan cinco comedores comunitarios y otros varios propios de las juntas vecinales. Giraudi explicó que «hemos detectado que muchas madres adolescentes y jóvenes no saben cocinar, porque han pasado gran parte de su niñez en los comedores comunitarios, de modo que el programa que estamos organizando tiene un doble sentido, cual es el de atacar el problema urgente de la alimentación pero también reconstituir lazos y prácticas afectadas entre las familias en situación de riesgo social».

La funcionaria estimó que a mediados del año en curso comenzaría ya la puesta en marcha efectiva del programa, transfiriendo a las familias el protagonismo decisivo. Apuntó que «la idea es fortalecer todo el proceso con la compra, la cocción y la reunión en torno de la mesa familiar».

Giraudi no descartó la implementación de alguna modalidad de ticket de compra que el municipio entregaría a las familias, para facilitar el proceso integral.