Mural gigante en un monoblock de Cipolletti: tres pisos y un pedacito de Buenos Aires
Nube, Sider y Atis, son tres graffiteros de Buenos Aires y Río Negro que se unen para llenar de vida un paredón inmenso en el barrio El Gigante. Este proyecto nace de una convicción: el arte debe estar al alcance de todos.
El arte callejero se mete de lleno para estallar en colores en los barrios de Río Negro. De la mano de un proyecto artístico y colaborativo, tres graffiteros argentinos alzaron sus pinceles y trazaron un rumbo común: llegar a esos lugares donde nadie llega; al barrio, a lo alto; trepando andamios y coloreando lo que ahora es gris.
Viajero, educador y comprometido con la cultura hip hop, Héctor David Berterini alias “Nube Oner” es del conurbano bonaerense. Visita Río Negro este fin de semana para dirigir la odisea de pintar un mural de grandes dimensiones en un nucleo de viviendas típico del Alto Valle, un monoblock de tres pisos.
“Nube”, en sus más de 17 años de trayectoria, ya estampó sus creaciones en cinco muros de gran formato en edificios de cinco pisos de Buenos Aires. Con la mochila cargada de experiencias desde el centro del país, plasmará su impronta en las calles del interior junto a dos artistas rionegrinos, “Sider” de Cipolletti y “Atis” de Roca.

El equipo trepará andamios durante cinco jornadas a partir de este lunes 28 de julio y a puro látex, le dará vida a un paredón en el barrio El Gigante. De esta manera, concretarán el primer muro de estas características en la ciudad de Cipolletti, al estilo porteño.
Este proyecto llamado “El Gigante” nace de una convicción: el arte debe estar al alcance de todos. “La idea del proyecto es acercar este tipo de consumos culturales a lugares donde realmente no se llega”, contó a Diario RÍO NEGRO, Atis, la artista roquense que se sumó al desafío.

Anahí Julia Tiscornia (Atis) es profesora y licenciada en Artes Visuales de la Universidad Nacional de La Plata, nacida en Roca. Es docente en la Universidad de Río Negro y en el IUPA. Su obra va desde el muralismo, la pegatina y el graffiti y está expuesta por los más recónditos rincones de la provincia.
Rodrigo Muñoz (Sider) es otro de los locales, quien dejó su huella en muros del país y del mundo. Si bien nació en Salta, es rionegrino por adopción. Se graduó de licenciado en Artes Visuales y tiene 17 años de trayectoria en el arte urbano. Su obra se expresa a través del graffiti y el muralismo a gran escala.
Para llevar adelante la gran obra, que estiman tener finalizada el 1 de agosto, cuentan con el acompañamiento de la Secretaría de Cultura del Municipio de Cipolletti.
Resignificar el paisaje urbano: el edificio de todos los días
El paisaje urbano es un territorio vivo, común y expresivo; y por eso buscan darle otro significado, transformador. “El arte urbano tiene el poder de transformar no sólo los muros, sino también las miradas y la forma en que habitamos lo cotidiano”, cuenta el artista bonaerense. Así, los murales se convierten en herramientas de comunicación colectiva, de identidad barrial y de memoria compartida.

La propuesta de «Nube» no se agota en la pintura sino también en que el momento de la realización de la obra sea de encuentro, reflexión y construcción colectiva en el barrio, con los vecinos.
Uno de los propósitos es promover la conformación de espacios de participación e integración social, que fortalezcan lazos comunitarios.
Una obra itinerante: murales por los barrios del país
“Nube” lleva adelante este tipo de trabajos desde 2023 con el propósito de “democratizar el acceso al arte urbano”, revalorizando el entorno urbano y social mediante la creación de murales de gran formato en el espacio público.
Las primeras seis ediciones del proyecto se llevaron a cabo en barrio Don Orione, ciudad de Claypole y barrio Las Catonas, ciudad de Moreno, provincia de Buenos Aires. En esas intervenciones participaron destacados artistas como Peck, Muto, Sew, Senart, Craw, Octubre, Isla o Roger.
Con el tiempo, la idea se fue expandiendo y Nube asumió el desafío de viajar a adentrarse a otras regiones del país y fue sumando a exponentes locales en cada lugar. “Esta etapa busca tender puentes entre regiones, visibilizar las identidades propias de cada lugar y fortalecer el vínculo entre el arte, el territorio y la comunidad”, aseguró Nube en su proyecto.
El arte callejero se mete de lleno para estallar en colores en los barrios de Río Negro. De la mano de un proyecto artístico y colaborativo, tres graffiteros argentinos alzaron sus pinceles y trazaron un rumbo común: llegar a esos lugares donde nadie llega; al barrio, a lo alto; trepando andamios y coloreando lo que ahora es gris.
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