Se demora la llegada masiva de turistas a Bariloche: cuáles son las causas
Un relevamiento da cuenta de un 69% de reservas para la primera quincena de enero en Bariloche. Lo atribuyen al fin del Previaje, la crisis económica y el aumento de la oferta turística informal.
Lejos está Bariloche de alcanzar el récord histórico del mes de enero del 2022, cuando el 97% de ocupación se reflejó en los alojamientos, comercios, paseos, excursiones y playas. La ocupación promedio del último fin de semana alcanzó el 70% y los relevamientos vinculados a la primera quincena de enero arrojan el mismo resultado.
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«Las reservas nos dan un 69%, desde hostels y cabañas a hoteles cinco estrellas. Estamos muy lejos de los valores históricos de ocupación en torno al 90% aunque, por ahora, es una proyección tentativa«, aseguró Martín Lago, presidente de la Asociación Hotelera Gastronómica de Bariloche.
Los responsables de complejos hoteleros no descartan que los turistas reserven a último momento y de este modo, la primera quincena mejore. «Quizás solo se trate del mismo efecto que afectó a otros rubros que ya sintieron un aplazamiento en la decisión de consumo ya sea por el Mundial o las fiestas de fin de año y ahora, se despierte el interés», plantearon.
«Es posible que el turismo atraviese lo que hace tres o cuatro meses les llegó a otros sectores: un amesetamiento y la caída del consumo por la inflación y porque los salarios no acompañaron. De hecho, el supermercadismo manifiesta una caída constante en las ventas desde hace cuatro meses», sugirió Lago.
Recordó que el último Previaje (el programa de preventa turística que lanzó el Ministerio de Turismo de Nación para ayudar al sector después de la pandemia) se extendió hasta los últimos meses del 2022. «No podemos tomar hoy esos porcentajes de ocupación cuando nos encontramos con demanda más depurada, más fiel al bolsillo de la gente«, indicó.
Otro inconveniente que destacan los operadores turísticos es la gran cantidad de departamentos y casas de alquiler turístico no habilitados. Incluso, muchos barilochenses aprovechan para poner su casa en alquiler cuando se toman vacaciones.
Lago mencionó que el relevamiento estadístico de la Secretaría de Turismo da cuenta de 670.000 turistas al año y 30.000 camas habilitadas. «La Universidad Nacional de Río Negro, en cambio, estima que el verdadero arribo de turistas es de 1.200.000. Nada menos que el doble; por ende, podemos inferir que el número de camas del sector informal son las mismas que en el formal», planteó.
Puso como ejemplo la proliferación de edificios en la ciudad. «Claramente hay una oferta paralela informal y una demanda. Es lógico: te cocinás, tenés un jardincito y otras comodidades. La diferencia es que al no tributar, no pagar salarios en blanco y no pagar servicios con medidores comerciales tiene más margen para bajar su tarifa», dijo Lago y mencionó publicaciones en las redes sociales en las que se ofrecen casas para cuatro personas a 18.000 pesos. Dijo que una habitación en un hotel 3 estrellas está en torno a los 25 mil y 28 mil pesos. «Es difícil competir cuando tenés que pagar todo en blanco», afirmó.
Con el contexto actual, los propietarios de establecimientos hoteleros anunciaron promociones tarifarias para captar la atención de los visitantes.
Afluencia de turismo extranjero
En contraposición a la retracción de turismo nacional que se visualiza al comienzo del verano, aumentó la afluencia de extranjeros en Bariloche, especialmente de Estados Unidos, Italia, España, Alemania e Israel.
Los especialistas recordaron que la altísima demanda nacional en el último tiempo obedeció a dos variables. Por un lado, costaba viajar al exterior por las medidas por el Covid-19. El dólar tampoco ayudaba.
«Ahora mucha gente retomó sus vacaciones fuera del país. Y a la vez, hay una fuerte caída del consumo. Encima ya no hay Previaje», indicó Lago, pero el optimismo no se pierde: «Si se sigue retrayendo la demanda del segmento nacional, uno puede compensar con los extranjeros«.
Recordó que cuando Argentina recuperó su conectividad aérea, se generó otra situación. «El Previaje fue un estímulo contundente para que la gente consumiera servicios dentro del país. Pero cuando el extranjero demandaba butacas no encontraba oferta. Ahora, al haber menos demanda, están empezando a llegar», indicó Lago.
Turismo mochilero, sobre la marcha
Desde la Asociación de Hostels en Bariloche advirtieron que no hay un buen porcentaje de reservas para el verano en ese segmento. De todos modos, aclararon que este tipo de demanda se genera «con menos anticipación».
«Quizás un grupo está en Calafate y mañana decide venir a Bariloche. Por eso, creemos que la temporada será buena«, manifestó Pablo Molteni, secretario de la Asociación de Hostels de Bariloche.
Advirtió que, al no haber Previaje esta temporada estival, «habrá que esperar un verano como los previos a la pandemia y no como el último del 2021 cuando teníamos todo vendido».
A su vez, destacó la promoción del Emprotur: «El trabajo ha rendido sus frutos porque Bariloche es el destino más elegido a nivel Previaje y venta de pasajes de Aerolíneas Argentinas. No es magia«.
Finalmente, consideró la necesidad de que el estado municipal y el sector privado trabajen en conjunto para fiscalizar la oferta turística informal. «No es solo una problemática para los alojamientos habilitados que no pueden competir con esas tarifas sino que es un problema para el residente barilochense que no puede encontrar casa«, dijo.
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