Soplan vientos jóvenes de cambios en la Conmebol

Una generación cuya edad promedio es 50 años asumió las riendas de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) con promesas de modificar algunas cosas en la institución rectora de Sudamérica. El paraguayo Juan Ángel Napout tiene 56 años y es el flamante presidente, que sustituirá hasta mayo del año próximo al renunciante Eugenio Figueredo de Uruguay, que a sus 82 años pasa a la vicepresidencia de la FIFA, vacante desde la muerte de Julio Humberto Grondona. El colombiano Luis Bedoya, con 54, es uno de los tres vices de Conmebol, elegido ayer al producirse una serie de cambios provocados por el deceso de Grondona. Rafael Esquivel, de Venezuela, pasa a ser de los dirigentes más veteranos de la nueva cúpula de la Conmebol, con 67, pero equilibra la balanza el chileno Sergio Jadue, con tan solo 35. Este equipo tendrá bajo su responsabilidad los próximos diez meses de gestión del fútbol sudamericano, en los que deberá preparar la Copa América que se jugará a mediados de año y el Mundial Sub 17, entre noviembre y diciembre (ambos en Chile). Napout ofreció ayer su primera rueda de prensa como titular de Conmebol y prometió trabajar en equipo, rompiendo un molde de conducción personalista que impuso su compatriota Nicolás Leoz, quien renunció en abril de 2013, a los 84 años. Y que tenía aquí en AFA a Grondona. “Nunca trabajé de manera personalista, nunca he puesto al individuo por encima de las instituciones, siempre he trabajado en grupos, con amigos, con personas leales que compartieron ideales y esa manera de trabajar la voy a trasladar ahora a la Confederación”, prometió Napout. Fue la primera señal de que habrían cambios. “Estoy seguro que con el apoyo de mis amigos dirigentes vamos a fortalecer a la Conmebol”, dijo también Napout. A su lado y en los cargos de vices estarán el colombiano Bedoya, el chileno Jadue y el venezolano Esquivel, aunque Napout destacó particularmente a uno de ellos como sostén de su gestión. “Me alegra tener al lado a un compañero de muchos años como lo es Luis Bedoya, con quien llevamos casi carreras paralelas y hemos forjado una amistad maravillosa”, afirmó en la misma rueda de prensa, en la que también estuvo el uruguayo Wilmar Valdez, presidente interino de la Asociación Uruguaya (AUF). El tiempo dirá si los cambios decididos, obligados por la muerte de Grondona, abren una nueva etapa en la Conmebol.

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“Nunca trabajé de manera personalista”, juró el nuevo presidente, Juan Napout.