El buen amigo gigante”: Spielberg lo hizo de nuevo

El buen amigo gigante”: Spielberg lo hizo de nuevo

Este jueves llega a los cines la última película del gran director Steven Spielberg. Se trata de El Buen Amigo Gigante (The BFG, 2016), un largometraje basado en una de las obras escritas por el gran Roald Dahl (ver recuadro) que creó la historia como un cuento para dormir y llamó a la protagonista Sophie en honor a su nieta. En un orfanato de Londres, la pequeña Sophie (Ruby Barnhill) permanece despierta en su cama. Esta precoz niña de 10 años cree que todo puede pasar en la hora de las brujas, y pronto se dará cuenta de que eso puede ser cierto. Cuando se asoma por la ventana y mira hacia la calle divisa la figura de algo muy, muy alto, escondido entre las sombras. Sophie trata de esconderse pero es tarde, la extraña figura es en realidad un gigante que la agarra y la lleva hasta su lejana tierra. Por suerte para ella, este Buen Amigo Gigante (Mark Rylance) es amistoso y encantadoramente tímido y gentil. Ambos pronto comenzarán a encariñarse uno con el otro y una hermosa amistad nacerá entre ellos. Pero la presencia de ella atraerá la atención de otros gigantes cuyo mayor placer es devorar niños. Sophie y el BAG tendrán que diseñar un plan para deshacerse de ellos de una vez y para siempre.

Esta es la nueva historia que decidió contar el director Steven Spielberg, que se rodeó de viejos colegas como la guionista Melissa Mathison, el director de fotografía Janusz Kaminski y el compositor John Williams. Y además contó con los talentos de Rylance, Penelope Wilton (la Reina), Rebecca Hall (Mary), Jemaine Clement (Devoracarnes, el líder de los otros gigantes) y la presentación de Ruby Barnhill, una talentosísima, fresca y natural niña que debuta en el cine y que eclipsa casi sin esforzarse la pantalla grande (sí, estamos ante una futura estrella). Todo eso, sumado al toque tan particular del realizador, hace de este film un largometraje imperdible.

No caben dudas de que Steven Spielberg se maneja como pez en el agua con cualquier género que intente abordar. Tiene films biográficos como Lincoln (2012), de terror como Tiburón (1975), ciencia ficción de la mano de Encuentros Cercanos del Tercer Tipo (Close Encounters of the Third Kind, 1977), de aventuras con Indiana jones y los Cazadores del Arca Perdida (Raiders of the Lost Ark, 1981), dramas como El color Púrpura (The Color Purple, 1985), comedias del tipo 1941 (1979), suspenso al mejor estilo Puente de Espías (Bridge of Spies, 2015) o bélicas como Rescatando al Soldado Ryan (Saving Private Ryan, 1998), eligiendo entre muchísimas cosas. Sí, este hombre lo puede hacer todo. Pero hay algo que maneja con brillantez y en donde más reluce su candor y su amor por contar historias: y esas son las películas en las cuales tiene a niños como protagonistas. Se conjugan muchas cosas por las cuales se destaca: se toma el tiempo necesario para hacer el casting perfecto en busca del pequeño actor/actriz que necesita. En general las tramas tienen mucha aventura, y los protagonistas compran al espectador de inmediato. Entiende a la perfección lo que es ser niño y cómo se viven esos maravillosos años. Crea mundos fantásticos adonde todo el mundo quisiera ir y, por qué no, quedarse un rato a vivir.

Ya sea detrás de cámaras o como productor o guionista, Spielberg ha sabido tocar la fibra sensible de los adultos o invitar a los más pequeños a atreverse a soñar y vivir aventuras como los personajes de las películas. Basta repasar unos cuantos títulos de los que participó en su carrera: E.T., El Extraterrestre (E.T. the Extra-Terrestrial, 1982), Gremlins (1984), Volver al Futuro (Back to the Future, 1985), Los Goonies (The Goonies, 1985), El Secreto de la Pirámide (Young Sherlock Holmes, 1986), Pie Grande y los Henderson (Harry and the Hendersons, 1987), Viaje Insólito (Innerspace, 1987), ¿Quién Engañó a Roger Rabbit? (Who Framed Roger Rabbit , 1988), Hook (1991), Jurassic Park (1993), Las Aventuras de Tintín – El Secreto del Unicornio (The Adventures of Tintin, 2011) y Super 8 (2011), por nombrar sólo un pequeño puñado de títulos, y sin siquiera habernos metido con la televisión.

Mirado así, nos damos cuenta el estilo que impuso y la tendencia que marcó. Él delineó un tipo de cine en la década del ochenta que marcó a fuego a generaciones y a cineastas que lo precedieron. Con El Buen Amigo Gigante se atreve a hacer un cine para chicos que nadie se anima hoy, sin importarle los números, las cifras, lo que está de moda o lo que vende. Steven Spielberg quiere emocionarse con lo que cuenta y poder transmitirlo. Se divierte, juega, imagina, se sensibiliza, emociona y encanta a la vez, porque es un niño jugando a su juego favorito: el de narrador.

Así como nuestros hijos se van a dormir felices, arropados por los cuentos que les leemos a la noche y que hacen que sus fantasías de desaten y sus imaginaciones vuelen, lo mismo intenta hacer este grandioso director con sus largometrajes y nosotros. Gracias Steven, por no haber crecido nunca y seguir jugando con nosotros.

Mientras llega el jueves, mirá el trailer de la peli:

Roald Dahl: una imaginación inagotable

“El Buen Amigo Gigante” está basado en el libro El Gran Gigante Bonachón, publicado en 1982 por el escritor Roald Dahl. Este prolífico autor galés comenzó a escribir a los 26 años mientras prestaba servicio en Royal Air Force durante la Segunda Guerra Mundial. Lo enviaron a Washington como agregado militar y su primer trabajo fue publicado en la edición del 1 de agosto de 1942 de la revista The Saturday Evening Post. Se trataba de un cuento titulado A Piece of Cake, pero fue cambiado por Shot Down Over Libya. Su carrera fue exitosa y escribió tanto para chicos como adultos. Mucha de su obra fue adaptada al cine y la televisión. Los títulos más conocidos son: 36 Horas (36 Hours, 1964), del cuento Beware of the Dog. Willy Wonka y la Fábrica de Chocolate (Willy Wonka & the Chocolate Factory, 1971), La Maldición de las Brujas (The Witches, 1990), Jim y el Durazno Gigante (James and the Giant Peach, 1996), Matilda (1996) y El Fantástico Sr. Zorro (Fantastic Mr. Fox, 2009), entre muchísimas otras. Dahl además fue guionista e incluso fue el anfitrión de una serie de ciencia ficción llamada ‘Way Out (1961).