Un hematoma en la cabeza, tras un golpe
La “colección subdural crónica” es vulgarmente conocida como un hematoma en la cabeza, es decir una acumulación de sangre “antigua” y de productos de la descomposición de esa sangre localizados entre la superficie del cerebro y la duramadre. Su fase “crónica”, como señala el comunicado del gobierno, comienza varias semanas después del primer sangrado, generalmente por un traumatismo. El médico cirujano Fernando Iglesia dijo a DyN que los “hematomas subdurales ocurren cuando las diminutas venas que corren entre la duramadre y la superficie del cerebro se rompen y dejan escapar sangre, se junta y coagula en el espacio subdural, entre las dos capas que recubren el cerebro, y los síntomas aparecen entre la semana y el mes desde que se produjo”. Por lo general se presenta como resultado de un traumatismo craneal que puede ser leve, en el caso de la presidenta el golpe que sufrió el 12 de agosto. En el tratamiento de este tipo de afección el objetivo es controlar los síntomas y minimizar o prevenir un daño cerebral permanente. Los hematomas subdurales crónicos que causan síntomas generalmente no sanan por sí mismos con el tiempo. Por ello, los especialistas analizarán en los próximos días las opciones menos traumáticas y seguras para curar a la presidenta. Una arritmia, el otro síntoma detectado en la presidenta, es una anomalía en el ritmo de los latidos del corazón y puede tener varias causas. Por esto no necesariamente este síntoma está relacionado con el primer problema señalado.
La “colección subdural crónica” es vulgarmente conocida como un hematoma en la cabeza, es decir una acumulación de sangre “antigua” y de productos de la descomposición de esa sangre localizados entre la superficie del cerebro y la duramadre. Su fase “crónica”, como señala el comunicado del gobierno, comienza varias semanas después del primer sangrado, generalmente por un traumatismo. El médico cirujano Fernando Iglesia dijo a DyN que los “hematomas subdurales ocurren cuando las diminutas venas que corren entre la duramadre y la superficie del cerebro se rompen y dejan escapar sangre, se junta y coagula en el espacio subdural, entre las dos capas que recubren el cerebro, y los síntomas aparecen entre la semana y el mes desde que se produjo”. Por lo general se presenta como resultado de un traumatismo craneal que puede ser leve, en el caso de la presidenta el golpe que sufrió el 12 de agosto. En el tratamiento de este tipo de afección el objetivo es controlar los síntomas y minimizar o prevenir un daño cerebral permanente. Los hematomas subdurales crónicos que causan síntomas generalmente no sanan por sí mismos con el tiempo. Por ello, los especialistas analizarán en los próximos días las opciones menos traumáticas y seguras para curar a la presidenta. Una arritmia, el otro síntoma detectado en la presidenta, es una anomalía en el ritmo de los latidos del corazón y puede tener varias causas. Por esto no necesariamente este síntoma está relacionado con el primer problema señalado.
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