Una ballena deleita a todos muy cerca de la costa

LAS GRUTAS (ASA).- Una ballena se encuentra de visita en la costa grutense desde hace varios días. El animal recorre la parte norte del golfo San Matías con toda naturalidad, lo que convocó a los residentes de la zona a la orilla del mar durante la última semana.

El domingo pasado, el enorme cetáceo acaparó la atención de los habitantes de esta villa, que se acercaron multitudinariamente a la playa a apreciar sus piruetas a simple vista. Al público local se sumó una gran cantidad de propietarios de viviendas y turistas que cada fin de semana llegan hasta este lugar.

En la platea preferencial en que se transformó el acantilado y la costanera se veían también sanantonienses y recreacionistas provenientes de localidades cercanas que salieron a pasear aprovechando el buen clima, después de varios días de lluvia y frío.

El mar, calmo y azul a menos de 100 metros de la orilla fue el escenario perfecto para la ballena franca austral, que hizo su recorrido incesantemente desde la Quinta Bajada hasta la Cero. Tras ella, por la Costanera, los espectadores se trasladaban en masa para no perderla de vista.

Las bajas profundidades de estas playas obligaron a que la Prefectura Naval Argentina montara un operativo de precaución para que no quedara varada. No obstante, el cetáceo se comportó con tranquilidad y en ningún momento sufrió algún percance que pudiera ocasionarle un varamiento.

Un gomón de la fuerza la acompañó durante bastante tiempo controlando que no tuviera inconvenientes.

La tarde del domingo fue increíble. Ni siquiera los residentes de esta villa, acostumbrados a hermosos paisajes marinos, escaparon de la sorpresa de percibir en el mar a muchos animales de distintas especies que se acercaron a la costa como escoltando al cetáceo.

Toninas, delfines y lobos marinos nadaban a pocos metros de distancia de la ballena en una plácida convivencia. En tanto, una gran cantidad de pájaros marinos se alimentaba de algún numeroso cardumen.

Desde las 11 a las 21 del domingo centenares de personas caminaron una y otra vez a lo largo de los 800 metros de Costanera siguiendo la trayectoria del animal. No es extraña la visita de ballenas a Las Grutas, pero sí la cercanía con que ésta nadó el último domingo, frente a la mirada de niños y adultos fascinados.

Muchos comerciantes locales comenzaron a soñar con que la visita de este animal que permanece desde hace una semana no sea un hecho aislado e impredecible, sino que el paso por Las Grutas se convierta en un rito obligado en la vida de los cetáceos. De esta forma se generaría un nuevo atractivo turístico para la temporada baja.

La tendencia a «trepar» aguas arriba en el golfo San Matías que están manifestando los clásicos habitantes de la Península Valdés se potencia año tras año. A partir de fines de julio cada vez son más las que llegan hasta esta zona (ver aparte).

Esta ballena de la especie franca austral hace días que recorre la playa frente a Las Grutas. Ayer no se la vio, quizá porque el mar se presentó más «picado» que el día anterior o tal vez porque se trasladó hacia algún sector más alejado. El domingo se acercó hasta unos cien metros de la costa, sacó su cola y se mostró ante cientos de personas que apenas podían creer lo que la naturaleza les ofrecía.

La buena costumbre de visitar Las Grutas

Los comerciantes grutenses esperan que la visita de ballenas a la costa de esta villa sea una costumbre en esta especie que se concentra anualmente frente a la Península Valdés, en Chubut.

Sin embargo, no es extraña su llegada, ya que todos los años se ven cetáceos de esta familia recorrer la costa norte del golfo San Matías, tanto en la península Villarino, en cercanías del puerto de ultramar, como frente a los acantilados grutenses.

Pero pocas veces tan cerca de la orilla. Además, el domingo se dieron todas las condiciones. El día estuvo espléndido y la gente de la zona estaba necesitada de salir a pasear después de varios días de lluvia constante. El mar, sin una ola, permitió que los movimientos del animal se apreciaran sin dificultad desde la arena y mejor aún desde la Costanera, en lo alto del acantilado.

Después de vivir mar adentro durante buena parte del año, en invierno las ballenas buscan la costa por razones biológicas y permanecen allí casi toda la primavera.

El 5 de agosto pasado, desgraciadamente dos cetáceos murieron al este del Puerto de San Antonio Este, luego de quedar varadas en la orilla, desconcertadas por varios bancos de arena. En tanto, otra fue rescatada hace unos diez días luego de que la sorprendiera una bajamar en el interior de la bahía San Antonio, frente a la punta Delgado. La tarea de Prefectura y del Instituto de Biología Marina y Pesquera «Almirante Storni» permitió que el animal zafara y nadara aguas adentro.

El domingo, en tanto, este animal -que no se descarta que sea aquel que el viernes 8 de este mes se varó frente a Alpat- recorrió sin problemas la costa de Las Grutas. El operativo de Prefectura fue montado solamente por precaución.