Una resurrección necesaria

Era hora. Las dos últimas derrotas (ante España y Serbia) habían dolido y mucho en el seno del plantel, y estando el Mundial tan cerca de comenzar, la situación amenazaba con tornarse peligrosa.

Ayer el seleccionado argentino experimentó una sensible mejoría y le ganó 94-72 a Eslovenia, por la segunda fecha del cuadrangular de Singapur. El equipo dirigido por Sergio Hernández levantó claramente su nivel en relación a la pálida imagen que dejó en la derrota del viernes frente a Serbia y Montenegro y consiguió una clara victoria.

Luis Scola, con 21 puntos, y Andrés Nocioni, que anotó 17, fueron los máximos anotadores del equipo albiceleste, que hoy desde las 7.30 enfrentará a la poderosa España en el cierre del torneo, última etapa de la puesta a punto para el Mundial que comenzará el próximo sábado en Japón.

En un primer cuarto parejo, los eslovenos se impusieron 22-20. Revitalizado por el ingreso de Carlos Delfino, la Argentina reaccionó en el segundo parcial y tomó ventaja en el marcador. Delfino hizo doce puntos en la primera mitad y el equipo albiceleste se fue al descanso largo 48-42 arriba.

Cuando reanudaron, Argentina potenció su superioridad, con un Scola que volvió a ser tan importante como en el primer cuarto, en el que había anotado 11 tantos. Bien acompañado por Nocioni, Scola resultó vital para que la Argentina sacara una ventaja de 28 puntos (77-49) al finalizar el tercer cuarto, en el que los europeos apenas anotaron nueve puntos.

Eslovenia levantó un poco sobre el cierre y se quedó con el último cuarto por 23-17, pero igual la Argentina terminó ganando por 22 puntos.

Ayer estuvo ausente Juan Ignacio «Pepe» Sánchez, aquejado por un dolor en la espalda. Su lugar fue ocupado por Daniel Farabello.