El 36% de la factura de Edersa se lo llevan la Provincia y los municipios

El costo eléctrico en Río Negro contiene cargas del 27% al 41% por los tributos, tasas y obligaciones ajenas al servicio, con un promedio de 34%. El gobernador Alberto Weretilneck se despega del desgrave pretendido por la oposición en el Congreso y aporta otro gesto político al gobierno nacional, defendiendo su política tarifaria.

“Ese aumento se reflejó en el presupuesto y el IVA se quedaba así hasta el 2022”, dijo mientras resaltó que las “cosas de la macroeconomía no se pueden modificar cada tres meses”. Weretilneck además resguarda el aporte del IVA en la coparticipación y defiende la continuidad de Ingresos Brutos de las provincias.

Obviamente, el IVA, con 21%, es el mayor elemento impositivo en las tarifas eléctricas y su equivalente provincial es Ingresos Brutos, con 4% en Río Negro. Cada municipio tiene su incidencia.

Al defender Ingresos Brutos, el gobierno rionegrino explica que lo aplica “dentro de los parámetros establecidos en el Acuerdo Fiscal, firmado en noviembre”. Las cooperativas de Bariloche (CEB) y Río Colorado (Cearc) están exentas de ese tributo.

Un informe del ministerio de Energía evalúa el impacto en una tarifa promedio con impuestos para 500 kilovatios hora (kWh) por mes en cada provincia. En Río Negro –puntualmente Edersa– figura con 1,17 por kWh de costo mayorista, 0,77 del valor agregado de distribución, 0,23 de transporte y la asigna 0,70 por impuestos y tasas.

Estos cargos encarecen en un 44% el precio final.

En el total de 2,87 pesos por kWh, ese componente llega al 24% en Río Negro.

En cambio, un análisis preliminar de la Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica (Adeera) lleva al 50% a la presión rionegrina, entre los más altos, conjuntamente con las distribuidoras de Buenos Aires.

Un relevamiento propio consigna una carga por obligaciones nacionales, provinciales y municipales del 41%, incluyendo descuentos de Edersa por servicios locales y aportes a los bomberos.

Iniciado el debate, la administración rionegrina se despegó y, recientemente, desde Bariloche, Weretilneck se alineó con la estrategia del gobierno nacional en la discusión en el Congreso, impuesta por la oposición para eliminar impuestos y bajar tarifas. El rionegrino defendió el Consenso Fiscal, con una reestructuración tributaria ya prevista para los “próximos seis años”, y expresó que “no se puede modificar las cosas de la macroeconomía cada tres meses. Todos sabíamos que íbamos a tener un aumento tarifario, que se reflejó en presupuesto y que el IVA iba a quedar así hasta el 2022. Esto no se puede cambiar ahora”, resaltó.

Como la base imponible de las tasas y los impuestos es el consumo eléctrico, los municipios y la provincia mejoran la recaudación con cada tarifazo.

“Todos sabíamos que íbamos a tener un aumento tarifario, que se reflejó en presupuesto. Esto no se puede cambiar ahora”.

El gobernador Alberto Weretilneck defendió el tarifazo.

Golpe

Como ejemplo,

basta una boleta

Una factura domiciliaria de Viedma de diciembre tenía un costo 422 pesos con un consumo de 166 kWh/mes. El “cargo fijo” era de 68,96 y el “variable”, de 180,03 pesos. Se suma la “contribución por uso espacio aéreo” (15,40); Ingresos Brutos (8.58), IVA (60,10) y ley nacional 25413 (3,45): un total de 87,53 pesos. Siguen alumbrado público (75,60) y “aporte ciudadano a bomberos” (10). Son 173,13 pesos ajenos al servicio operativo, que equivale al 41% de la factura.