Volvieron a arder gomas en el centro de Bariloche
Una veintena de piqueteros exigió respuestas a sus reclamos.El humo volvió a invadir el Centro Cívico. Con el reparto de alimentos, el municipio descomprimió la protesta.
La manifestación del Movimiento de Trabajadores Desocupados de Bariloche adhirió a la «jornada piquetera» nacional de hoy, al tiempo que se reclamaron alimento, leña y trabajo. La protesta dejó al descubierto la insuficiente estructura de contención de la gestión del intendente Alberto Icare, que no pudo evitar un estallido en plena temporada.
El nuevo reclamo piquetero, el segundo realizado desde el inicio del invierno turístico, se sumó a los recurrentes paros y retenciones de servicios del personal municipal en plan de lucha por el marcado atraso salarial que mantiene la comuna.
Una veintena de piqueteros, provenientes de los barrios más carenciados de la ciudad, volvieron a exigir asistencia alimentaria, habitacional y trabajo en un petitorio que reclamaba la instrumentación de un «impuesto» a los turistas para la obtención de fondos hoy inexistentes.
Unos de los manifestantes, apostado frente a la intendencia, aseguró: «venimos a pedir lo mismo que la vez anterior, porque no nos dieron nada, la entrega de alimentos alcanzó para la mitad de la gente y no dieron respuesta a ninguno de los demás reclamos».
En el petitorio de tres puntos, firmado por el «Movimiento de Trabajadores Desocupados» y el Movimiento Anarquista de Liberación Obrera», los manifestantes exigieron el cobro de «1 o 2 pesos a cada turista» para solventar los proyectos productivos presentados por los distintos barrios.
La demanda incluyó el pedido de una reunión con el empresariado y el resto de la autoridades municipales para garantizar la instrumentación del gravamen turístico que está siendo estudiado por la Mesa de Concertación Social.
En el mismo escrito, los piqueteros fundamentan el pedido, dirigido a Icare, en el hecho de que «surgen muy pocas propuestas» de parte del intendente, y que «poseen muy pocas posibilidades de ayudarnos, ya que carecen de fondos».
Ante la ausencia del intendente, el reclamo fue recibido por el secretario de Gobierno, Adolfo Fourés, quien alcanzó a coordinar la entrega de un centenar de bolsas con alimentos para descomprimir la protesta, tras ser reiteradamente increpado por los manifestantes.
«A nosotros nos han atendido siempre, pero lo que queremos son respuestas concretas», le espetó uno de los piqueteros al funcionario, que ayer pasó a ser el tercer interlocutor del actual gobierno frente al mismo grupo de manifestantes, que no ven soluciones a sus reclamos.
Mientras tanto, el intendente Icare se encontraba en Viedma, a donde viajó acompañado por el edil Jorge Temporetti y dirigentes del Soyem, para gestionar ante el gobernador Pablo Verani la regularización de los fondos de coparticipación y de las deudas por tasas de la provincia.
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