Lo declararon culpable de matar a su hijastro de 3 años

El primer juicio por jurados del año culminó ayer en esta ciudad con el veredicto de culpabilidad para Raúl Alberto Molina, el único acusado de asesinar al hijo de su expareja, Benjamín Montecinos, de apenas tres años.

El veredicto se dio por el voto positivo de diez de los doce miembros del jurado y correspondió al delito de homicidio simple, tal como lo solicitó el fiscal Pablo Vignaroli.

Con esta declaración de culpabilidad resta ahora que se fije una nueva fecha para la realización de las audiencias de imposición de pena en las que Molina podría recibir una condena de entre 8 y 25 años de prisión efectiva.

El crimen ocurrió el 10 de febrero de 2015 en la zona del río Neuquén del barrio Nueva España de Centenario y se dio en medio de una relación violenta entre Molina y la madre del pequeño, Juana Zapata. Por esos episodios de violencia la relación había terminado, aunque Zapata reveló que tras la ruptura Molina la atacó varias veces, e incluso la violó.

Asesinato y violación

Esa noche el hombre le exigió a Zapata que viniera desde Plaza Huincul a verlo pero ella acudió con su hijo menor, Benjamín. Una vez en Centenario, el hombre se llevó al pequeño con la excusa de que sus padres vieran al niño. La fiscalía sostuvo en el juicio que recorrió apenas 250 metros hasta el lugar en donde lo asfixió y luego volvió con Zapata y abusó sexualmente de ella.

Poco después Molina se entregó en la comisaría 20 de Parque Industrial contando que se había “mandado una cagada” con el nene. E incluso le solicitó a los policías que lo mataran. Sin saber si era cierto lo que decía le pidieron que los guíe hasta la zona de la costa que mencionaba y fue entonces cuando encontraron el cuerpo del pequeño.

La autopsia determinó que el niño fue asfixiado con su propia ropa, la cual le fue introducida varios centímetros por la boca.

Zapata padeció durante más de un año y medio estar acusada como coautora del crimen, hasta que recientemente fue sobreseída al determinarse que en realidad era víctima de violencia de género. Al declarar ante el jurado la mujer contó entre lágrimas que “ni siquiera me dejaron ir al entierro de mi hijo”.

Daniel Montecinos, el padre del pequeño, contó que desde que su hijo menor tenía seis meses que no lo veía y mientras detalló que sólo le queda una foto de él, recordó que tuvo que batallar para que la Justicia le permitiera participar en la causa dado que, con su exmujer acusada, a él nunca lo notificaron.

Molina se llevó al pequeño con la excusa de que sus padres vieran al niño, pero recorrió apenas 250 metros hasta el lugar
en donde lo asfixió.