Alta Patagonia exige un lote para hacer un hotel

La concesionaria del centro de esquí de Bariloche reclama, luego de ver frustrado su intento de extender medio siglo el permiso de explotación de la montaña, la entrega de parte del municipio de 1,5 hectáreas ubicadas en Villa Catedral para la construcción de un complejo hotelero. El intendente Gustavo Gennuso ya le dijo que no, lo que le abre a la empresa la vía judicial.

El derecho sobre el terreno, esgrime la empresa, está contemplado en los pliegos originales de licitación, de 1992. En el medio, la propiedad de la montaña pasó de la provincia a la jurisdicción municipal; y la empresa concesionaria, Catedral Alta Patagonia SA, fue adquirida por la familia Trappa, dueños también de Vía Bariloche.

La empresa no reconoce la potestad del municipio (aduce que la conformidad que dio en su momento para la transferencia tenía un plazo que caducó antes de que el cambio se hiciera efectivo) y por eso mantiene abierta una demanda en la Cámara de Apelaciones de Viedma.

De todos modos, el año pasado se sentó a negociar una “iniciativa privada”: la empresa invertiría en una transformación integral del centro de esquí a cambio de la extensión de la concesión y de un “desarrollo urbanístico” en la montaña, en una zona media del cerro. La reacción de la comunidad de Bariloche condicionó a Gennuso, que terminó rechazando la propuesta.

Sobre el lote que ahora reclama Alta Patagonia, el contrato de concesión establece que “el destino del terreno será la construcción de un complejo de servicios turísticos de hotelería, de categoría no inferior a cuatro estrellas (…) de capacidad mínima de cien plazas en cincuenta habitaciones”.

“Se trata del lote de terreno de 15.281,66 metros cuadrados de superficie (…) en Villa Catedral, colindante a la actual estación interior del cable carril, con un edificio/vivienda de dos plantas existente en el mismo”, señala el contrato original.

“El destino del terreno -continúa- será la construcción de un complejo de servicios turísticos de hotelería de categoría no inferior a cuatro estrellas (…) y por lo tanto de capacidad mínima de cien plazas en cincuenta habitaciones. El inmueble existente deberá ser considerado para integrarlo al complejo”.

A la empresa le corresponde ese terreno por 50 años. Cuando ese plazo se extinga, podrá prorrogarse o recuperar las tierras a cambio de un resarcimiento por la inversión.

En la resolución que rechaza la pretensión, el intendente aduce que la empresa mal puede reclamarle algo a la municipalidad cuando desconoce su potestad sobre la montaña. Pero además, Gennuso señala que el “complejo hotelero” no formó parte de los acuerdos para la transferencia del cerro Catedral.

La concesión vence en nueve años.

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Alta Patagonia exige un lote para hacer un hotel

Ante la falta de reconocimiento expreso del poder concedente en cabeza de la autoridad municipal, resulta incongruente que se someta el planteo a la definición del municipio.

El intendente Gustavo Gennuso en la resolución 256 de este año.