El legado de un ilustre viedmense fue donado al Museo Ema Nozzi

En Patagones, luce el patrimonio de Jorge Humble, un pionero en Viedma. Fue cedido por sus descendientes.

Una imagen en carbonilla, un violín Stradivarius, un reloj de pared en pleno funcionamiento, y baúles para portar medicamentos que pertenecieron en el siglo XIX al médico, educador y pastor anglicano Jorge Humble; animan el paseo del Museo Ema Nozzi de Patagones. El patrimonio de quien está considerado como un pionero en Viedma fue cedido por sus descendientes.

Estaban guardados por la familia en una coqueta casona de Guido al 200 de esta ciudad, y al venderse, se decidió que este pequeño tesoro quede para la memoria colectiva en el espacios de muestras ubicado frente al muelle maragato.

El reloj aún funciona.
Pablo Leguizamón.

En Inglaterra, su país natal, Humble obtuvo el título de médico, cirujano, boticario, obstetra y oftalmólogo. En 1864, contando 34 años, llegó al establecimiento del Carmen, margen Sur que se llamaba Mercedes (luego Viedma).

El primer gobernador del territorio nacional de la Patagonia con asiento en Viedma, el coronel Alvaro Barros, lo nombró en 1879 como miembro de la primer Comisión Municipal en el área de Higiene e Instrucción Pública. Asimismo, se desempeñó como Juez de Menores para cuidar la salud de chicos húerfanos y con ese sueldo de la incipiente Gobernación pudo brindar asistencia a numerosos vecinos de la zona.

“Humble compartió la lucha por la salud pública teniendo buen trato con el sacerdote e impulsor del Hospital San José, Evasio Garrone, y bautizó a europeos e indígenas, actitud que se complementaba con su labor educativa a veces supliendo al Estado ausente hasta ese momento”, destacó un grupo de historiadores encabezados por el profesor Jorge Entraigas durante el acto de entrega de esos bienes patrimoniales. Se estima que tienen una antigüedad superior a los 150 años.

La cesión al museo de la otra orilla generó algunas posiciones encontradas. El profesor de historia Roberto Bovcon se preguntó en forma pública si “en Viedma y en la Provincia no hay ningún museo ni institución que se haga cargo del patrimonio histórico cultural rionegrino”.

El violín Stradivarius es el más admirado por todos.
Pablo Leguizamón.

Sin polémica

El director del museo maragato, Jorge Bustos, defendió un argumento histórico. “Humble -apuntó- tenía un sentido de la humanidad que dejó una huella en las dos orillas, nosotros también tenemos una especie de cosa un poco de ‘culpógena’, pese a que era un hombre de las dos orillas que no establecía ninguna diferencia, desde el punto de vista emocional, afectivo, y (aunque) es mucho más fuerte para los viedmenses que para los maragatos, también tenemos una conciencia de la importancia de la preservación del patrimonio”.

Aclaró que “la solución que encontramos especialmente para nuestras conciencias, porque la familia no nos puso ninguna condición, es que esta

colección estará a disposición de los vecinos de Viedma cuando tenga un museo”.

Bustos agregó que “no seremos tan mezquinos de atesorar y guardarnos (la colección) pero “entendemos que el patrimonio tiene un sentido colectivo universal, y sería muy pequeño que alguien dijera esto es mío y nada más, y sentimos que estamos cumpliendo una misión (de conservarlo)”.

Carlos Humble, el vocero de la familia, explicó que los objetos fueron cedidos a Patagones porque “está Bustos en el museo, caso contrario no estarían acá, y para nosotros Jorge….. es el ‘señor museo’”.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios