Alrededor de 5.000 militantes se movilizan para estar en el acto

NEUQUEN (AN).- Todos quieren estar hoy en San Martín de los Andes. La llegada del presidente Néstor Kirchner para celebrar el aniversario de la ciudad se convierte en el primer gran hecho político del año y se produce en un momento clave de las relaciones entre el gobierno nacional y el provincial. El gobernador Jorge Sobisch ha dicho que será «una verdadera fiesta» y con esa consigna su partido puso en marcha su poderosa capacidad de movilización y ayer aseguraron desde esta capital llevaría más de 3.000 simpatizantes. Tal vez con menos recursos y estructura pero con el mismo entusiasmo, el kirch

nerismo y los sectores aliados también trabajaron intensamente y, más modestos, prometen sumar alrededor de 2.000 militantes al acto.

Pero no sólo se trata de afiliados y simpatizantes, también los dirigentes políticos y gremiales estarán hoy en la ciudad cordillerana. Muchos de ellos llegaron ayer y otros amanecerán para la celebración. Intendentes, diputados provinciales y nacionales, concejales y funcionarios de distintos niveles de los ámbitos provincial y municipal, se disputaron los alojamientos en la ciudad, desde comienzo de semana.

Entre quienes esperarán la luz del sol en San Martín se cuenta al gobernador Jorge Sobisch, quien dijo en conferencia de prensa en la semana que «no quiero correr ningún tipo de riesgo, de manera que llegaré temprano, iré directamente al aeropuerto para darle la bienvenida al Presidente, junto al intendente Jorge Carro, y después iré al acto».

Otro que también se aseguró su presencia fue el intendente capitalino Horacio Quiroga, que desde hace un par de días se encuentra en la ciudad que, por otra parte, es su lugar de origen. La mayoría de los miembros de su equipo, según confió ayer un asesor, participará de las celebraciones.

Por el lado de los gremios, estarán presentes pero con disímiles motivaciones. Mientras que los estatales van con la doble intención de saludar a Kirchner y enarbolar sus reclamos a Sobisch, los afines al gobernador apuntan a «copar» la escena y bloquear cualquier manifestación adversa a la administración provincial.

Cuando se consultó a referentes de uno y otro lado, ambos negaron que pudieran haber enfrentamientos, pero a nadie escapa que de antemano se respira un aire de rivalidad. Obviamente, se espera que no pase de confrontar pancartas y cánticos.

«Para nosotros es muy claro, desde su discurso del domingo en Junín de los Andes el gobernador ha dicho que sólo espera que sea una fiesta y nosotros vamos con esa expectativa: generar un acto de celebración», dijo ayer Alberto «Beto» Durán, en medio de los militantes que iban y venían en la seccional Primera. Desde ese comando partidario clave, estaba previsto que salieron más de una decena de colectivos.

Nota asociada: VISITA PRESIDENCIAL: Kirchner llega a San Martín con la mochila cargada de anuncios  

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