Tensión diplomática por las papeleras

Los gobiernos de Argentina y Uruguay llamaron ayer a «consulta» a sus respectivos embajadores, en lo que significó una escalada diplomática generada por el gobernador Jorge Busti con una declaración pública en torno de la instalación de dos papeleras en el vecino país.

El gobierno uruguayo, que consideró «agraviante» los dichos de Busti, decidió ayer llamar a consulta a su embajador en Buenos Aires, Francisco Bonasso, tras lo cual en «reciprocidad» la administración argentina hizo lo propio con su representante en Montevideo, Hernán Patiño Mayer.

Pero Busti, quien ayer sugirió que el gobierno uruguayo avalaría la instalación de dos papeleras en Fray Bentos porque habría recibido «incentivos», apuró esta tarde un aclaración. En ese sentido, sostuvo que la administración oriental dio «una interpretación absolutamente equivocada» y en función de ello reaccionó en forma «desproporcionada» al llamar a su embajador.

Mientras tanto, un centenar de embarcaciones realizó ayer una caravana náutica y un abrazo simbólico al río Uruguay en rechazo a la instalación de las papeleras, frente a la ciudad entrerriana de Gualeguaychú. Lanchas, veleros, botes, kayaks y todo tipo de embarcaciones participaron de la protesta.