Total vendió Piedra del Aguila a un fondo

NEUQUEN (AN) – La empresa francesa Total vendió la totalidad de sus activos en generación de electricidad en Argentina a un grupo de inversión estadounidense. La operación incluye las acciones de la compañía en la hidroeléctrica Piedra del Aguila, sobre el río Limay, y en la central Loma de la Lata, en la provincia de Neuquén.

La operación fue entre Total y Merril, Lynch, Pierce, Fenner and Smith Inc., y una denominada Sociedad Argentina de Electricidad SA, una empresa que se llama igual que la antigua sociedad de Pérez Companc pero que tiene unos tres meses de actividad en el mercado.

La empresa Total Austral había logrado reestructurar a mediados de este año su deuda, logrando una reducción de 412.000.000 a 185.000.000 de dólares, tras cuatro años de negociaciones con sus acreedores.

Lo que la empresa francesa vendió es el 64,94% de Central Puerto SA y el 59% de Hidroneuquén SA, donde también es socio el Estado neuquino.

Central Puerto fue, en 1992, la primera generadora de energía privatizada. Tras la construcción de una central térmica en Loma de la Lata (muy cerca del club Mari Menuco) pasó a tener una potencia instalada de 2.165 megavatios, repartida en doce unidades ubicadas en las usinas de Puerto Nuevo y Nuevo Puerto, en Buenos Aires, y en la de Neuquén.

Piedra del Aguila, que había sido construida por la estatal Hidronor, fue privatizada también a principios de la década del 90. Es la más importante desde el punto de vista eléctrico de las centrales hidráulicas del Comahue y una de las más grandes del país.

Con ambos complejos, Total llegó a generar cerca del 10% del total de la oferta eléctrica del país. Junto con el anuncio de la venta de las dos participaciones, se supo que renunció la conducción de ambas empresa, encabezadas por el francés Jerome Ferrier.

La comunicación sobre la operación y el alejamiento de los directores fue realiza ayer por la tarde a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires. Total es una de las empresas que peor relación mantiene con el gobierno de Néstor Kirchner.

Por ahora no hay noticias sobre que fuera a desprenderse de sus activos en el negocio de los hidrocarburos, especialmente en el del gas. Merril, Lynch, Pierce, Fenner and Smith suele aparecer comprando este tipo de activos de los que, tras algunas restructuraciones, termina deshaciéndose.