Arqueólogos bolivianos descubren tumba en mítico Tiwanaku

TIWANAKU, BOLIVIA.- El hallazgo de una tumba en el sitio donde se erigía la pirámide de Akapana, en el Andes boliviano, se constituyó en uno de los principales logros arqueológicos de los últimos años en la milenaria ciudad de Tiwanaku, donde una cultura floreció 1.200 años antes de Cristo.

El arqueólogo boliviano Róger Cossío, del estatal Instituto Nacional de Arqueología (INAR), dio con las osamentas, adornadas con vestimentas, vasijas, una llama pequeña y piezas de oro, el pasado 28 de abril, que fueron exhibidas el miércoles pasado.

Tiwanaku ('piedras paradas', en lengua aymara) se encuentra ubicada a 71 km al oeste de La Paz, en la transitada ruta internacional entre La Paz y la ciudad peruana de Puno, sobre el Lago Titicaca. Los restos, posiblemente de un joven de 20 años -según Cossío- fueron encontrados en posición fetal, depositados en un orificio de 80 centímetros de ancho y un metro de profundidad en la cima de la pirámide de Akapana ('desde aquí se mide', en lengua nativa).

«Por la composición de la tierra y por el lugar ubicado es probable que se trate de un sacerdote o una persona de posición acomodada, porque hay adornos, vasijas y las piedras de oro y tendría una antigüedad estimada de unos 1.000 años», afirmó el arqueólogo boliviano.

Cossío también mostró las dos piezas de oro: una diadema circular laminada de 5 cm de diámetro que se encontró en la parte frontal de la cabeza, y un pectoral de 5×5 centímetros con una figura antropomórfica (ojos, nariz y boca).

El investigador Javier Escalante, del estatal Unidad Nacional de Arqueología, afirmó que «este es uno de los más importantes hallazgos en los últimos años, porque hemos encontrado los restos de un cuerpo humano casi completo, además de las otras piezas».

Acotó que la tumba es «intrusiva», es decir que las osamentas fueron colocadas en el lugar una vez que fue terminada la construcción de la pirámide de Akapana, que tiene forma de «T», con una altura de 18 metros y una superficie de 4 hectáreas (194×194 metros), constituyéndose en una de los más grandes de Sudamérica.