Se frustró el acuerdo con Paraguay y Oviedo no se mudará al sur

BUENOS AIRES – La crisis diplomática entre los gobiernos de la Argentina y Paraguay se agravó al fracasar ayer la reunión en la que los presidentes iban a sellar un acuerdo sobre el conflictivo asilo político del ex general golpista Lino Oviedo.

El encuentro entre los mandatarios José Luis González Macchi y Carlos Menem -que debía realizarse en Posadas- se postergó sin fecha después de que Paraguay se negó a pedir públicas disculpas a la Argentina por declaraciones consideradas agraviantes por la administración menemista. También trascendió que molestó a Menem que el documento planteado por Paraguay se refiriera a Oviedo como «prófugo» de la justicia.

Menem señaló que «las relaciones están un poco resentidas» y que «el diálogo se va a reiniciar una vez que el gobierno argentino, que representa al pueblo argentino, reciba las explicaciones del caso en forma clara y contundente».

El mandatario dijo que los funcionarios paraguayos «han sido muy duros» y advirtió, en tono severo, que «mientras no haya una rectificación clara sobre el tema, no hay posibilidad de reunirse».

El presidente paraguayo González Macchi responsabilizó el viernes a la administración menemista de «contribuir a la impunidad» al no otorgar la extradición del ex general Oviedo, manifestó el «malestar» del Paraguay por esa actitud e hizo referencia a «gestos inamistosos» por parte de la Argentina.

Hoy, en Posadas, estaba previsto que González Macchi pidiera disculpas por el tono inusualmente duro de sus declaraciones y, a cambio, Menem le anunciara que el asilado ex general Oviedo iba a ser virtualmente «confinado» a algún lugar de la Patagonia.

Corridas en Olivos

Cuando todas las versiones de fuentes diplomáticas hacían prever una distensión entre ambos gobiernos, mediante el encuentro personal de Menem con González Macchi, el clima febril que se vivió por la mañana en la residencia de Olivos -donde entraban y salían nerviosos funcionarios- dio el primer indicio de que las tratativas diplomáticas habían fracasado.

Sobre el mediodía, ya se sabía que el encuentro presidencial estaba postergado sin fecha y, poco después, Menem salió públicamente a exigir una rectificación de su par paraguayo y a comunicar que, mientras no se manifiesten las disculpas, el controvertido ex militar Oviedo seguirá residiendo en la zona metropolitana de Buenos Aires.

La crisis llevó al mandatario paraguayo a convocar de urgencia a su canciller, José Félix Fernández Estigarribia, y a llamar a una reunión plenaria de todo su gabinete para analizar qué actitud adoptar en adelante respecto de la Argentina, socio regional y país vecino y fronterizo.

La diplomacia

Pese a la firmeza de sus declaraciones, Menem dejó abierta la puerta de un eventual entendimiento al señalar que «quizás la semana que viene esté volviendo nuestro embajador a Paraguay (Jose María Berro Madero) y la embajadora de Paraguay (Leila Rachid) regrese a la Argentina».

Ambos diplomáticos habían sido llamados «a consulta» la semana pasada, una metodología que en la diplomacia expresa signos de malestar entre los países involucrados.

El mandatario argentino, además, explicó que Oviedo, asilado en Argentina desde el 28 de marzo pasado, continuará «donde está actualmente» hasta tanto Paraguay rectifique sus consideraciones hacia la administración menemista. (DyN e Infosic)