“Lo único cierto que dijo Kielmasz es que arruinó la vida de dos familias”

“Lo único de cierto que dijo Kielmasz es que nos arruinó la vida a dos familias de Cipolletti, han sido 20 años de bronca y de dolor. Nunca dejamos de creer que fue uno de los partícipes del crimen, aunque con él tuvo que haber otra persona para reducir a las chicas”, aseguró ayer Ulises González, padre de María Emilia y Paula Micaela, quienes junto a su amiga Verónica Villar fueron asesinadas en 1997.

Desde El Bolsón, su lugar de residentes, el hombre salió al cruce de las declaraciones que Kielmasz hizo a “Río Negro”, en las que negó ser el autor material del triple homicidio.

González recordó que a lo largo de dos décadas “hizo más de una declaración involucrando siempre a gente diferente. En un momento tenía a medio Cipolletti sospechado, creerle es muy difícil”.

“Varias veces amenazó con hablar , pero cambia de golpe su actitud. Es un tremendo mentiroso, muy difícil de creerle. Ojalá algún día dijera algo con pruebas, aunque la ausencia de nuestras hijas no se remedia con nada”, agregó.

El padre de dos de las chicas asesinadas, remarcó que “los que lo han estudiado han recomendado no dejarlo en libertad y nosotros hemos hecho mucha fuerza para evitarlo. Incluso ya podría estar gozando de salidas transitorias, pero con la ayuda de abogados y de gente de la justicia se pudo impedir”.

Sobre la investigación y el rol de la justicia tras el hecho, insistió con que “hubo una serie de errores que lamentablemente los vimos después. Uno nunca espera que le pasen este tipo de cosas y no está preparado, no se interioriza sobre como funciona cada institución. Sigo convencido de que hubo una mezcla de intereses mafiosos y convivencia de malos policías con gente del narcotráfico. Tampoco el poder político estuvo a la altura para que el crimen se esclareciera”.

“Por ese entonces, vivíamos en un lugar que tenía por slogan ‘Cipolletti, ciudad para vivir’ y después que pasó lo de las chicas nos dimos cuenta que era todo lo contrario y durante mucho tiempo siguió siendo una ciudad de muchos crímenes, con muertes generalmente de mujeres, gente joven”, agregó.

Sobre la posibilidad de verse con Kielmasz, cuando en 2020 vuelva a estar en libertad, Ulises González afirmó que “quizás al momento de encontrarlo mi reacción sea diferente a lo que pienso hoy. Es un hombre muy peligroso para la sociedad, así lo han dicho muchos psicólogos y psiquiatras que lo han tratado: es despiadado, soberbio, un psicópata que puede volver a matar. No está solo involucrado en la muerte de las chicas, sino que antes ya tenía otro crimen”.

Kielmasz “es un hombre muy peligroso para la sociedad”

FERNANDO BONANSEA

“Un poco de paz”

en El Bolsón

Ulises González recordó que conocieron El Bolsón en el año 1974, “cuando vine como gerente al ex banco de la Provincia de Río Negro. Fue entonces que compramos el terreno en Villa Turismo e hicimos la casa. Hace 6 o 7 años que estamos radicados con mi esposa, que también es jubilada bancaria”.

“Es el lugar que hemos elegido para vivir, rodeados de maitenes y cipreses. Aquí hemos encontrado algo de paz, ya que mientras estábamos en Cipolletti la presión era permanente por parte de todos aquellos que se preocupaban por el caso. Tenemos amigos, viene mucha gente a visitarnos, sobre todo en verano”, agregó.

“El sistema judicial está en deuda con la sociedad. Es muy costoso y los resultados, pobres. En Cipolletti hay una gran cantidad de crímenes impunes”.

“La investigación estuvo plagada de desorden. Encima, nos tocó un juez que no estaba capacitado”.

Ulises González, padre de dos de las tres víctimas.