Ahora, el tiro del final…

La imagen final en el Florencio Sola entregó a River acosando a Banfield en su propia casa, reafirmando la resurrección millonaria en un partido que estuvo a punto de terminar de la peor manera para el equipo de Ángel Cappa.

Hubo un par de escenas clave en el partido, con Juan Pablo Carrizo como protagonista. La primera a los 3’ cuando tras un centro de Santiago Ladino, el ‘1’ de River falló en el cálculo y la pelota le quedó a Sebastián Romero. “Chirola” amagó e insistió por arriba hacia la boca del arco, desde donde prevaleció Ramírez para poner establecer el 1-0.

La otra jugada que marcó el destino del partido fue a los 32, con un penal que ejecutó Ramírez tras una falta de Carlos Arano a Romero. Allí, Carrizo se lució al detenerle el penal a “Tito”, para que River pudiera mantenerse con vida en el partido.

En la segunda parte River arrancó buscando el empate. Ortega siguió encabezando los ataques y Pavone continuó siendo el delantero más peligroso de los Millonarios. De hecho a él le cometió penal Víctor López, que el Burrito cambió por gol.

Pero a los 22, el defensor tuvo revancha. Aprovechó un centro de Erviti y de cabeza anotó el 2-1.

River cambió entonces su esquema, entró Carusso como delantero y hubo doble enganche, con Mauro Díaz y Buonanotte.

Era todo o nada, pero finalmente llegó cuando a los 42, Román cabeceó un centro que mandó Pavone desde la izquierda. Esta vez River sufrió, pero al menos tuvo una recompensa.

DyN