Más de mil expositores para el debate en el Congreso por el aborto

Tras décadas de reclamos y media docena de proyectos frustrados, de marchas y contramarchas, finalmente este abril el Congreso Nacional comenzará a discutir, en Diputados, la despenalización del aborto. Será un debate largo, de por lo menos dos meses hasta llegar al recinto y con una participación de cientos de expositores y especialistas. Las estimaciones dentro de la Cámara sobre las posibilidades de aprobación varían, pero a 10 días del tratamiento hay consenso general de que las aguas están divididas en un centenar de legisladores por lado, y una cincuentena que aguarda para definir.

Desde que Mauricio Macri dejó “habilitado” el debate por el aborto legal en la apertura de sesiones ordinarias, fueron presentadas 8 iniciativas. El proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo de la Campaña Nacional por el Aborto Legal Seguro es el que más adhesión cosecha. Aunque el mismo texto debió esperar 11 años y fracasar en 7 intentos, con 72 firmas de todos los bloques este es el año en el que el aborto legal tiene más chances de salir.

La iniciativa principal plantea el derecho de toda mujer tiene derecho a interrumpir voluntariamente su embarazo en las primeras 14 semanas de gestación. El plazo tiene consenso. Los distintos proyectos hablan de creación de espacios de contención, tipo de drogas, reformas del código penal, hasta de períodos de reflexión mínimos antes del aborto para que la mujer ratifique su decisión (similar a la ley uruguaya). Se buscará incluir aportes de las demás iniciativas antes de llegar al recinto.

Diputados ya dio el cronograma de trabajo. Los encuentros para debatir las iniciativas se realizarán todos los martes y jueves entre las 10 y las 18, a partir del martes 10 de abril. Cada diputado nacional podrá llevar hasta cuatro expositores, que deberán inscribir antes del sábado. Si todos los diputados (256) llevan cuatro especialistas, habrá más de 1000 expositores.

Los proyectos se trataran en cuatro comisiones, todas presididas por diputados de Cambiemos. Pero la titularidad de las comisiones es una muestra del tipo de división que genera este debate. El macrista Daniel Lipodevsky (Legislación General) y la radical Alejandra Martínez (Familia y Mujer) están a favor de la despenalización. Carmen Polledo (Salud), del PRO, y Gabriela Burgos (Legislación Penal), del UCR, están en contra. Pocos temas han dividido las aguas transversalmente y no por bloques. Hay que remontarse, por ejemplo, a la ley de matrimonio igualitario, en el kirchnerismo.

A diez días del inicio, y al menos a dos meses del tratamiento, algunos ya sacan cuentas. Sólo entre los firmantes de los proyectos y quienes se pronunciaron públicamente a favor, fuentes parlamentarias calculan alrededor de los 95 diputados. Los decididamente en contra llegarían al centenar. Son necesarios 129 votos (la mitad más uno) para aprobar el proyecto. Una cincuentena no se ha pronunciado. Entre los que están a favor, hay optimismo en que la gran mayoría se inclinaría por el sí cuando el debate elimine el “tabú” del tema. Entre los que están en contra, reina sobre todo la prudencia.

Pero el debate también tiene eco en la calle. El aborto seguro, legal y gratuito fue el principal reclamo del paro y la movilización multitudinaria al Congreso, el 8 de marzo, en el Día Internacional de la Mujer. Los pañuelos verdes inundaron las calles porteñas y de todo el país. La réplica llegó la semana pasada: 25 mil personas sólo en Buenos Aires marcharon “por a la vida y al derecho a nacer”. Aunque multireligiosa (sin ignorar la presencia de ciudadanos laicos) y convocada por las redes, la Iglesia Católica participó con fuerza, convocó y alentó.

En febrero, apenas el gobierno dejó trascender que abriría el debate, el Episcopado respondió y calificó el aborto como “la eliminación de la vida que no se puede defender”. Despertó la duda de cuánto incidiría la figura del Papa argentino Francisco. De uno y otro lado creen que no demasiado.

Wisky: “El embarazo tiene que ser una elección”

P:¿Qué tipo de debate se viene?

R:Tenemos la obligación moral de que sea respetuoso y serio. Estamos hablando de entre 300 mil y 500 mil abortos por año. Si a eso sumas que 50 mil mujeres se internan por año por hacerse uno mal, y a eso le sumas que mueren entre 30 y 50 mujeres, notas que es un problema sanitario de alta magnitud. En los países que está despenalizado no sucede. También es una cuestión de igualdad de género, a la mujer no se le debe imponer, el embarazo tiene que ser una elección, un derecho. Estamos hablando de derechos, no de miradas filosóficas; de cómo vamos a organizar lo que ya sucede en Argentina. Y las mujeres que se internan, las que mueren, son de condición de pobreza; además de igualdad de género, hay que hablar de equidad.

P:¿Se puede dar un debate real? De un lado se considera una vida, del otro no.

R:Sí, se puede dar un debate sincero. Muchas veces se toman posiciones desde un lugar personal, por no haber profundizado el tema. Haber encapsulado el tema tantos años, ha fosilizado posturas. Al abrirlo, y lo novedoso es que el propio Presidente que lo abrió está en contra, rompe una lógica, puede cambiar miradas, informarse en el debate. Se puede construir una mirada común a pesar de tener miradas diferentes, la mirada opuesta sin ningún puente de diálogo es porque estaba cerrado el tema, era tabú.

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El misterio del voto de

Cristina en el Senado

Asumiendo que el proyecto de despenalización del aborto alcance los 129 votos en Diputados y obtenga la media sanción, a la iniciativa se le abrirá un nuevo capítulo, y quizás más duro. En el Senado, un ámbito históricamente más conservador, las cosas están lejos de ser claras.

En la Cámara Alta reinará, como en Diputados, la libertad de acción. Sin la necesidad de exponerse aún, muchos han preferido no anticipar posición, pero,por ahora, han sido más los que han adelantado su voto en contra, que a favor. Uno de los que apoyará la despenalización del aborto es el neuquino Marcelo Fuentes (FpV), que pronosticó que el resto del bloque K tendría posición uniforme. La duda es Cristina Kirchner, que si bien se muestra a favor del debate, no adelantó su voto. Siempre se ha mostrado en contra. El jefe del bloque del PJ, Miguel Pichetto, tampoco dio su posición. Mientras, el oficialismo impulsa una consulta popular.

El aborto seguro, legal y gratuito fue el principal reclamo del paro y la macha multitudinaria al Congreso, el 8 de marzo, en el Día Internacional de la Mujer.

Apenas el gobierno dejó trascender que abriría el debate, el Episcopado respondió y calificó el aborto como “la eliminación de la vida que no se puede defender”.

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Lorena Matzen (UCR), Río Negro: -A favor.

Martín Doñate (FPV) Río Negro:

-A favor.

Silvia Horne (Mov. Evita) Río Negro: -A favor.

Emilia Soria (FpV) Río Negro: -A favor.

Leandro Lopez (PRO) Neuqúen:

-Indefinido.

Darío Martínez (FpV) Neuquén:

-A favor.

José Ciampini (FpV) Neuquén:

-A favor.

Alma Sapag (MPN) Neuquén:

-Indefinido.

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