Atlético logró romper el maleficio

RIO COLORADO (ARC).- Después de mucho luchar y superar diferentes obstáculos, se quebró el maleficio. Pasaron ocho años para que el club Atlético Río Colorado se diera el gran gusto de consagrarse campeón del torneo Oficial de la Liga de Fútbol local.

Con este título, que consiguió hace un par de semanas, sumó un trofeo más a las nutridas vitrinas de esta tradicional entidad local.

Lo consiguió con una fecha de anticipación y sacando cinco puntos de ventaja al segundo. Durante las quince fechas del certamen, la regularidad fue la característica principal de este equipi que representará a Río Colorado en el torneo «Integración 2001».

En la mayoría de los encuentros mostró claridad en todas sus líneas, jugando un fútbol simple, preciso y contundente.

Y cuando los partidos se ponían duros, compensó fútbol con ganas, saliendo airoso.

Buena parte del logro está centrado en el cuerpo técnico encabezado por el «Gallego» Jorge Luis Giner. El entrenador se hizo cargo del equipo a principios de temporada y con la mismos jugadores de ediciones anteriores, logró conformar un grupo con hambre de gloria.

Se comenta que los equipos se arman de atrás para adelante. Y eso hizo.

En el arco contó con la seguridad y eficiencia del arquero José Luis Pino, quien tuvo actuaciones memorables. Incluso en un mismo partido atajó dos penales.

La defensa fue un bastión infranqueable, con una destacada actuación del joven Diego García, muy bien acompañado por Miguel Angel Méndez, Facundo Pérez, Richard Bilbao, Jorge Lastra y Omar Echavarría.

En el mediocampo, la presencia de Jorge «Burru» Escala le dio personalidad y recuperación, mientras que el «ida y vuelta» estuvo a cargo del polifuncional Juan Anselmo Roca e Ignacio Elizondo. La creación recayó en Diego Sosa y Sergio Storm. En la zona de definición fue fundamental el aporte de Mario García, Andrés Bilbao, Roberto López y Fernando Pérez.

En la penúltima fecha, las bardas de la vecina localidad pampeana de La Adela fueron testigos de los festejos. Después de vencer a Villa Mitre, todo fue algarabía.

Dirigentes, cuerpo técnico y jugadores se unieron en un interminable abrazo, para luego cumplir con el ritual de la vuelta olímpica. Juan Carlos «El Cato» Canale -junto a Pablo Castillo y Hugo García los dirigentes que más trabajaron- no pudo contener las lágrimas por la emoción.

Después fue el turno de la tradicional caravana por las calles céntricas agitando banderas gritando y cantando «verde campeón» hasta exprimir las eufóricas gargantas.

El mentor de un equipo ganador

Jorge Luis Giner, más conocido como el «Gallego», es un hombre de fútbol. Durante años fue el goleador más temido de la región. Jugó varios regionales y nacionales con Cipolletti en la década del «80 con la nueve en la espalda. También se calzó las casacas de Alianza de Cutral-Co, Independiente de Neuquén y Centro Español. Muchos en el Alto Valle aún recuerdan su paso por las canchas de la zona. Para retirarse volvió a Río Colorado jugando en Defensores de la Colonia y Atlético, coronándose también campeón.

La «redonda» siguió siendo su pasión y luego de hacer el curso de técnico, empezó a dirigir equipos locales. Primero fue en Villa Mitre donde salió campeón en el «94, después Defensores de la Colonia, logrando los títulos en el «98 y «99. Hasta que llegó el desafío de Atlético, un equipo con figuras, pero que no podía conseguir el título.

«El grupo no estaba del todo bien en la parte anímica, entonces la premisa era motivar al jugador y hacerle ver que si le ponía ganas y sacrificio a la hora de entrenar estaban en condiciones de pelear cualquier certamen. El plantel era rico en calidad. En un primer momento costó un poco pero en la medida que se dieron los resultados, el equipo empezó a responder», contó el «Gallego».

Más adelante, explicó las principales virtudes del plantel. «Es un grupo de jugadores jóvenes con experiencia, no bajó nunca los brazos en la adversidad y cuando nos fue mal siguió luchando», apuntó.