Mercado del usado: «Es difícil cerrar tratos cuando los salarios no acompañan»

El concesionario de Mario Balbo es otro de los referentes del mercado de usados en General Roca.

Allí el encargado de comentar cómo ven desde esta firma el mercado de usados fue Alejandro.

“Por ahora se venden autos nuevos y usados, pero la cadena se corta cuando se dejan de conseguir autos nuevos como está pasando ahora, el que tiene un modelo 2018 no lo vende, y el que tiene un 2015 no lo puede cambiar por uno más nuevo y así pasa. Cualquier eslabón de la cadena que se resiente afecta a todos los demás”, sostuvo ante la consulta.

“Hoy se vende mucho a crédito, se trabaja muy bien lo que es cuota fija a través de financiación bancaria, créditos prendarios. Nosotros tomamos autos de no más de 10 años de uso porque es lo que se puede financiar, si vienen con un modelo 2006 o 2007 no lo puedo recibir porque es una herramienta de financiación que pierdo, obviamente tenemos que optar por vehículos en los cuales tenemos más herramientas para ofrecerte como cliente”, cuenta sobre cómo trabajan.

En pocas palabras traza un panorama completo de cómo está la plaza regional hoy en lo que respecta a usados: “No está fácil el mercado, estamos todos en la misma, pero uno busca mover siempre la rueda con las limitaciones que hay”.

Pero las complicaciones no se presentan solamente para el concesionario, ya que del otro lado, el del cliente, también pasan cosas. “Ahora por ejemplo se nota mucho los que quieren vender autos seminuevos porque no los pueden mantener, porque la cuota se les escapó, porque el seguro es carísimo, o la patente igual, hay mucha gente que busca achicarse, modelos 2020 o 2021”.

La razón es muy simple y hay que buscarla directamente en el bolsillo de cada uno. “Hay autos que pagan de patente 40.000 pesos cada dos meses, o una camioneta que paga por un seguro 15.000 o 20.000 pesos por mes, a eso sumale el combustible que son unos 10.000 pesos cada vez que vas al surtidor, son 40.000 pesos de gastos fijos por mes para empezar, no cualquiera puede mantener eso”, destaca Alejandro.

Salarios no acompañan

Desde el punto de vista de la comercialización es difícil cerrar tratos cuando los salarios no acompañan para hacer grandes inversiones.

Dice Alejandro: “Cuando se financia queremos vender algo que sea real y que lo puedas mantener, pero vos preguntás por los sueldos y ganan menos de 100.000 pesos por mes, entonces con una cuota de 30.000 o 50.000 pesos por el auto ¿cómo hacés para vivir?

“Si vos podés pagar una cuota de 30.000 o 35.000 por mes, que no es poca plata, con eso te puedo financiar 500.000 pesos, pero acá en el salón el auto más barato que tengo vale 2 millones de pesos, tenés que tener 1,5 millones disponibles para hacer la compra, no todos lo tienen”, aclara sobre las dificultades que presente el mercado para el concesionario a la hora de vender.

La influencia del dólar

“Esto se mueve cuando pasa algo con el dólar, el auto siempre se vio como una inversión en este país, entonces alguien que agarra un peso pregunta ¿qué hago? ¿cambio el auto? Mucha gente lo ve como una forma de protegerse de la inflación”, grafica sobre lo que pasa a nivel nacional y regional.

Por otro lado está presente todo lo que conlleva tener funcionando un emprendimiento de este tipo. “En el concesionario hay gastos fijos mensuales que hay que cubrir, la luz no es lo mismo acá que en una vivienda, acá abrís la puerta y tenés que contar con 100.000 pesos para cubrir gastos”, dice Alejandro.

Todo eso se cubre con lo que se obtiene de la compra venta de autos, que ya dejaron de ser tan grandes como lo fueron en otras épocas.

“Los márgenes de ganancia son relativos, no es lo mismo un auto barato que una camioneta, pero hay que mover no menos de 5 autos por mes, hay meses que capaz vendés dos vehículos, si vendés 8 es un festival, si vendés 5 es más o menos, y si vendés 2 es nada. Mirá los números de los que hablamos cuando antes de las PASO vendías 20 autos por mes”, finalizó Alejandro.