Baja inversión e inflación inquietan a economistas

Gentileza

CÓRDOBA.- La principal coincidencia entre los economistas que participan de la jornada por el 33º aniversario de la Fundación Mediterránea que se celebra aquí es la necesidad de que crezca la inversión. Entienden que sólo de así podría controlarse la creciente inflación. Más allá de algunas diferencias de matices, los expertos creen que la actual coyuntura es favorable y que, salvo cambios significativos en el contexto externo, el PBI del próximo año crecerá apenas por debajo del 2010, aunque la suba de precios estaría por arriba del actual período.

Las disertaciones fueron seguidas por unos 500 empresarios y dirigentes.

Orlando Ferreres fue el primero en plantear que el mayor inconveniente es la falta de inversión reproductiva. Aunque este año crecerá 20% respecto a 2009, está 17% por debajo del 2008. “No tenemos capacidad de respuesta y eso alienta la inflación”, dijo y puso como ejemplo el caso de la ganadería, que ya no puede abastecer al mercado interno y a las exportaciones.

“Como se nos vino la inflación encima, tratamos de frenar el tipo de cambio”, apuntó y señaló que la percepción de que el dólar está bajo mantiene altas las compras que, aunque menores al año pasado, “siguen como hormigas. No hay una política antiinflacionaria tampoco por parte del Banco Central, ya que la emisión continúa”, agregó.

Entre los desafíos de Argentina para el año próximo enumeró la inflación, el atraso del tipo de cambio, la escasez de inversión y el déficit fiscal. Estimó que en 2011 la economía crecerá algo menos que este año, pero “la expansión volverá con fuerza en 2012 y 2013 ya que las condiciones internacionales son similares a las de 1880. El mundo busca lo que nosotros tenemos”.

Por su lado, el ex presidente del Central, Javier González Fraga apuntó que el actual plan económico es “consistente con el objetivo perverso del gobierno de maximizar sus posibilidades políticas” de cara a las elecciones del próximo año, a la vez que advirtió que no hay inconvenientes importantes en el corto plazo, ya que no ve luces rojas con la deuda ni con la recaudación ni con las reservas. En ese contexto estimó que la administración kirchnerista sostendrá las políticas monetaria y fiscal expansivas, con lo que continuará el recalentamiento de la economía.

A pesar de su preocupación por la suba de precios, González Fraga aclaró que no cree que se espiralice: “Tienen que ser muy torpes para que el dólar paralelo salte, no lo van a permitir y, sin eso, los riesgos se acotan”. En ese contexto, estimó que la divisa cerrará el año apenas arriba de los 4 pesos.

Las exposiciones de los economistas, en esta oportunidad fueron seguidas por un número importante de políticos que se acercaron al hotel. Entre los porteños destacó Gabriela Michetti, quien debió postergar su intención de hablar sobre planes futuros del macrismo, para dedicarse a responder sobre los colegios porteños tomados y el derrumbe del boliche de Palermo que dejó dos muertos.

También estuvieron Felipe Solá y Francisco de Narváez. Un comentario que hizo a la comidilla de la reunión fue la posibilidad –dada por cierta por la mayoría– de que González Fraga sea ministro de Economía si el peronismo federal gana en el 2011.

Juan Carlos de Pablo amenizó el almuerzo sin aportar datos significativos. En medio de chistes y anécdotas planteó que, pese al discurso oficial, “hoy los resultados de su política son los mismos que los de (Alfredo) Martínez de Hoz y de los 90, lo que cambia es que la razón es distinta. En ese entonces el tipo de cambio caía por el retorno de capitales y el endeudamiento, hoy lo hace por la mejora de los términos de intercambio. La diferencia es que ahora puede durar mucho más, incluso hasta el próximo gobierno”.

Roggio, Amengual y Pagani escuchan a los economistas en el seminario de Fundación Mediterránea.

GABRIELA ORIGLIA

Especial para “Río Negro”