Boca dio una muestra de jerarquía y está en semis de Libertadores

El partido fue casi todo del xeneize, que debió haber cerrado antes el partido pero se encontró con el neuquino Arias.

Tras la ida 1-0 para el equipo de Beccacece, Boca le ganó a Racing 2 a 0 en La Bombonera por el partido de vuelta de cuartos de final de la Copa Libertadores y con este resultado se metió entre los cuatro mejores. Jugará contra Santos de Brasil en la primer semana de 2021.

Miguel Ángel Russo metió dos cambios respecto del equipo que jugó en Avellaneda, mientras que el DT de La Academia mantuvo los mismos once que ganaron hace una semana. La batalla táctica había sido favorable a Beccacece en el Cilindro, pero en La Bombonera la cosa fue distinta desde el inicio.

El primer tiempo fue todo de Boca. Con Diego González gobernando la mitad de la cancha, desbordó por derecha con Eduardo Salvio y Frank Fabra por izquierda. Gabriel Arias fue la figura por taparle pelotas Carlos Tevez y Sebastián Villa, pero Salvio lo pudo quebrar con un cabezazo que abrió la cuenta a los 22′.

Para el complemento, el DT de la visita puso a Darío Cvitanich y Augusto Solari por Fértoli y Rojas. Boca también tuvo un cambio importante porque González, de excelente partido, tuvo que dejar la cancha por lesión y fue reemplazado por Nicolás Capaldo.

Pero el trámite no cambió y el local tuvo más opciones con Soldano y Villa, pero entre Arias y que los delanteros de Boca definieron al cuerpo del arquero, el segundo tanto tardó en llegar.

Fue hasta que Salvio recibió dentro del área mano a mano con Lisandro López, capitán de Racing. El capitán de Racing cometió penal y Roldán no dudó. Pese a que el designado para patear era Izquierdoz, Villa tomó la responsabilidad y con un derechazo cruzado venció al arquero neuquino sobre los 16′ del complemento.

A los 20′ del segundo tiempo, Racing llegó por primera vez. Cvitanich se la bajó a Licha y el zurdazo del 15 se fue apenas alto. La visita se apoderó de la pelota en los siguientes minutos porque no le quedaba otra y su rival sintió el desgaste de haber cargado con la responsabilidad del partido.

Desde los 30’ hubo un agarrón adentro del área de Lisandro López sobre Carlos Alcaraz. Patricio Loustau, encardado del VAR, chequeó pero decidió no sancionar, dado que no fue eso lo que generó la caída del jugador de Racing.

El mismo pibe forzó a los 35’ la primera atajada de Esteban Andrada en el partido, pero de ahí en más, el equipo de Sebastián Beccacece pagó muy caro su tibieza y nunca estuvo cerca del gol.

En el cierre, Boca estuvo más cerca del tercero con Villa que su rival del descuento. La victoria fue justa y debió ser más abultada, pero lo que le importa a Russo y sus muchachos es que se cumplió el primer objetivo de llegar a los cuatro mejores.


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