Brasileños analizan producir biodiésel en Neuquén

Es una de las primeras plazas argentinas posibles para llevar adelante el proyecto

NEUQUEN (AN).- Técnicos de la firma petrolera Petrobras desembarcaron en esta capital para analizar la posibilidad de producir biodiesel en la provincia.

El proyecto se encuentra en la etapa de evaluación y, de ser viable, se podrá realizar en Neuquén el proceso completo, desde la producción de la materia prima hasta la comercialización del biodiesel.

Neuquén fue elegida por la firma brasileña como una de las primeras plazas argentinas posibles para llevar adelante el proyecto, para el que piensan tentar al gobierno provincial.

En ese marco, ayer arribó a esta capital un grupo de técnicos brasileños para analizar y evaluar en conjunto con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), las condiciones del suelo y del clima de la provincia y determinar así la viabilidad de la propuesta.

En Argentina hay diversos proyectos en marcha y varias plantas de pequeña y mediana envergadura en marcha. Y en el caso de Neuquén, un microemprendimiento de China Muerta produce biodiesel a partir del reciclado de aceite de fri

tanga.

«Empezaremos un estudio de viabilidad social y económica para saber qué tipo de semillas se pueden producir en esta zona, qué posibilidades hay de elaborar el combustible y qué mercado potencial podría existir», comentó ayer Sócrates Márquez Da Silva, coordinador del programa Biodiesel, en la sala de arribos del aeropuerto internacional de Neuquén.

Para la elaboración de este combustible ecológico se parte de la extracción a través de químicos del aceite contenido en las semillas denominadas «oleaginosas» como la soja, el girasol el maní o el mamón típico de Brasil, entre otras.

Mediante un proceso especial, ese aceite se transforma en un combustible energético de múltiples aplicaciones, sobre todo en vehículos o equipos con motores diesel. Se puede utilizar puro, combinado, o con otros subproductos del petróleo.

El biodiesel es apto par ser utilizado en cualquier actividad productiva que requiera de combustibles derivados de los hidrocarburos.

Márquez Da Silva conjeturó que incluso podrá ser empleado para los procesos de prevención de heladas que utilizan los chacareros del Alto Valle de Río Negro y Neuquén.

«Es un combustible que puede entrar en la matriz energética como cualquier otro», agregó.

Los técnicos brasileños realizarán estudios preliminares asesorados y acompañados por el INTA para determinar qué tipo de semillas oleaginosas se pueden producir en Neuquén.

En una segunda etapa se intentará precisar qué posibilidades económicas y financieras existen para ejecutar el proceso de elaboración. Según las estimaciones de Márquez Da Silva, esta primer evaluación lanzará resultados definitivos a finales de 2005.

Esta etapa inicial permitirá, además, conocer el costo de la producción de las semillas y del proceso completo de elaboración del biodiesel.

Con estas cifras los técnicos podrán a su vez estimar la cantidad de combustible ecológico que se podrá producir por año.

«En Europa es costoso, pero los gobiernos están subsidiando el proceso de producción. Y en este proyecto intentaremos también incluir la participación del gobierno local», adelantó el técnico brasilero.

Alemania es uno de los países europeos que incluyó el biodiesel en sus ofertas hidrocarburíferas. Produce alrededor de 1.000.000 de metros cúbicos anuales.


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