Burla a la democracia

Enrique Omar Driussi, DNI 12.638.127
General Roca

Como argentino, siento vergüenza y lástima por los ciudadanos de la provincia de Formosa, que están bajo la dominación del régimen autocrático de Gildo Insfrán.

Con el fraude eleccionario del pasado domingo, será el único gobernante que se perpetuará 32 años seguidos en el poder, cuando termine su 8vo mandato.

¿Cómo lo logra? Controlando y obligando el voto cautivo de todos los empleados públicos, y las instituciones de esa provincia.

¿Qué logró durante estos 28 años ininterrumpidos en el poder? Pobreza y subdesarrollo. Lo demuestran sus indicadores económicos y sociales.

Para la Corte Suprema de Justicia, “la esencia del sistema constitucional es la limitación de los poderes públicos a sus atribuciones y facultades demarcadas”.

El dictamen de Rosenkranz describe que “un rasgo fundamental del sistema republicano de gobierno es la existencia de mecanismos para evitar la concentración del poder y, en última instancia, evitar la dominación u opresión por parte de los gobernantes”.

En Formosa no hay democracia. La ciudadanía no tiene opciones.

Insfrán es un veterinario que en lugar de ejercer su profesión, eligió llenarse los bolsillos usurpando el poder político en una provincia pobre y alejada, convirtiéndola en su feudo.

En nuestra República Argentina, no debemos tolerar más la ineptitud y la corrupción de los políticos, sean nacionales, provinciales o municipales, de cualquier partido.