Cavallo ratificó su candidatura y prometió no atacar a Macri

BUENOS AIRES.- El titular de Acción por la República, Domingo Cavallo, ratificó ayer que será candidato a diputado por la Capital en las próximas elecciones y prometió no atacar a su rival Mauricio Macri, porque según dijo “compartimos muchas ideas” y, de llegar al Congreso, “empujaremos las misas cosas”. “Sí, soy candidato y mi esposa (Sonia Abrazián) también está en la lista en segundo lugar”, confirmó esta mañana Cavallo en diálogo con Radio del Plata. El ex ministro de Economía no hizo alusión a las trabas que le puso la Justicia a su mujer, por no figurar en los padrones de la Capital ya que tiene domicilio en la provincia de Córdoba.

Sobre Macri, Cavallo prometió que “no lo voy a atacar” ya que es, según dijo, “una persona que tiene muy buenas intenciones. La gente tendrá que pensar si vota a Mauricio para que entre (Eduardo) Borocotó o el tercero o cuarto de la lista, o me vota a mí para que entre yo y mi esposa, que va a hacer una tarea muy buena”, dijo Cavallo.

Asimismo, sostuvo que “la gente, más que decir 'si voto a Cavallo voto en contra de Mauricio', no tiene que pensar así, lo mismo que si vota a Mauricio no está votando en contra mío”.

De la misma manera, elogió al candidato de centroderecha en la provincia, Ricardo López Murphy, en contraposición a las postulantes por el justicialismo, Cristina Fernández de Kirchner y “Chiche” Duhalde, al señalar que su figura expresa, en lugar de “lucha de aparatos, algo fresco y nuevo en la política argentina”.

En otro orden, al referirse a la interna del PJ bonaerense, y particularmente al acto de lanzamiento de Cristina Kirchner, Cavallo sostuvo que la primera dama pronunció “un discurso que nada tenía que ver con propuestas o programas para Argentina, sino que refleja una gran división y una gran pelea con el duhaldismo”.

Sin embargo, fue más duro a la hora de referirse al duhaldismo. Según dijo, “fue el gran responsable del descalabro argentino: primero por el exceso de gasto y endeudamiento de la provincia de Buenos Aires, que fue el más alevoso de todos en la década del 90, y después, por decisiones que implementó (el ex presidente Eduardo) Duhalde en enero de 2002, que destruyeron la base legal del sistema económico y social argentino”. (DyN)