Concesionaria deberá pagarle 363 mil pesos por fallas en un cero kilómetro
El cliente compró el auto en 2012 y luego de llevarlo 5 veces al servicio mecánico oficial resolvió presentar una demanda. Recién el año pasado se lo entregaron y presentaba daños.
La Cámara de Apelaciones en lo Civil de Cipolletti rechazó un recurso por parte de la concesionaria Iruña S.A. y confirmó la sentencia de primera instancia que ordenó pagarle 363 mil pesos más intereses a un cliente por la compra de un auto 0 kilómetro que presentó fallas.
El juez civil, Marcelo Gutiérrez afirmó que lo que realizó la firma fue “despreciativo” y que sumió al cliente en una situación “descalificante, injusta e indigna”.
El juez de primera instancia había considerado que el demandante paso 1254 días sin poder disponer de su vehículo.
El cliente afectado había comprado un automóvil marca Volkswagen, modelo Gol Trend cero kilómetro, pero el día de la entrega, un 27 de julio de 2012, ya presentó problemas mecánicos.
De hecho tuvo que llevarlo en varias oportunidades al servicio mecánico de Iruña. El fallo condenó a esta firma y a Volkswagen Argentina S.A a pagarle a un usuario la suma de 363.500 pesos.
Cuando presentó la demanda por daños y perjuicios, el cliente declaró que tuvo que llevar cinco veces el vehículo al taller oficial.
La entrega fue el 27 de julio, y ya el 18 de septiembre ingresó por una pérdida de líquido hidráulico. El 15 de octubre ingresó nuevamente por la misma falla. El 4 de abril del año siguiente otra vez, por la misma falla. Luego, el 5 de junio por luz de check encendida y falla.
Finalmente el 17 de julio de 2013 volvió a llevarlo al servicio por agua en la bujía y hasta la fecha en que presentó la demanda la unidad aún no le había sido entregada.
Desde Iruña S.A. contestaron la demanda asegurando que el rodado estaba listo para ser retirado, pero el cliente no quiso ir a buscarlo.
Finalmente se presentó con un escribano en la sede de la empresa y pudo corroborar que efectivamente el auto estaba allí, pero presentaba daños. A simple vista se advertía que, por ejemplo, le faltaba el logo en el frente y la patente.
“Evidentemente no se encontraba en condiciones para ser retirado”, dice el fallo de primera instancia. El usuario recién pudo hacerse de su vehículo el 27 de diciembre de 2017 a pesar de las condiciones en las que se encontraba.
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