Condenaron a 17 años al autor del crimen de “Yon” Mansilla

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SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Jonathan “Yon” Mansilla había viajado a Tres Arroyos a promocionar viajes de egresados a Bariloche como empleado de una empresa. Su deseo era conocer ese lugar y ahorrar dinero para regresar a esta ciudad y continuar sus estudios en Turismo. Sin embargo, fue asesinado el 7 de mayo del 2011 en aquella ciudad de la provincia de Buenos Aires. Tenía 22 años. El jueves su padre, José Mansilla, fue notificado de la decisión que tomaron los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal de Tres Arroyos, Bernardo Bibel, Alberto Mazzini y Fabiana Brandolín: condenaron a la pena de 17 años de prisión a Diego Godoy, como autor penalmente responsable del crimen de su hijo. “Siempre dije que no iba a estar conforme con la condena, pero viendo que pasaron tantos casos que ni siquiera encuentran a los culpables, estamos conformes”, dijo a “Río Negro” el padre del joven asesinado. El hombre indicó que las audiencias del juicio se realizaron el 16 y 17 de este mes en Tres Arroyos y que viajaron con su familia para presenciarlas hasta los alegatos. Recordó que como querellantes habían pedido 22 años de prisión para el acusado y el fiscal Gabriel Lopazzo había solicitado 20. En cambio, la defensora oficial Laura Pereyra había requerido la absolución o, en su defecto, una pena menor por exceso en la legítima defensa. El hecho ocurrió alrededor de las 6 de la madrugada del 7 de mayo del 2011, cuando Godoy y otro joven atacaron a Mansilla en la calle Maipú 250, cerca de un local bailable. Godoy apuñaló al joven barilochense en el corazón, lo que causó su muerte. El padre de dijo que se tiene que realizar otro juicio contra el segundo atacante, Matías Chico, quien está acusado de participación secundaria en el homicidio. Y el otro probable juicio sería contra Pedro Neira, quien está acusado se haber manejado el vehículo en el que se trasladaba Godoy antes de atacar a Mansilla. “Pasaron dos años y en mi familia aún no hay consuelo”, expresó el padre. Destacó que algunas madres de estudiantes de Tres Arroyos que conocieron a su hijo los acompañaron en el juicio. “Los chicos a los que mi hijo les vendió el viaje vinieron al año siguiente a Bariloche y nos conocimos –recordó José–. Se armó un grupo muy solidario con nosotros”.