Crecen las tomas de las viviendas de Sisvial en San Antonio Oeste

Martín Brunella

SAN ANTONIO OESTE (ASA)- Luego de que el martes una pareja que tiene un convenio con la cooperativa Sisvial usurpara una de las primeras 86 casas levantadas por el IPPV, que están en proceso de ser adjudicadas, quienes se consideran preadjudicatarios de cada una de estas viviendas, ubicadas en las tierras otorgadas a Sisvial por la comuna, tomaron una decisión similar. La primera usurpación generó inquietud entre los vecinos que esperan que se dé a conocer el listado de los adjudicatarios, por eso la gente decidió entrar a las viviendas, que inicialmente estaban custodiando mediante un ‘acampe pacífico’ que cada uno de ellos realizaba en la puerta del domicilio, que, según lo que especulan, les correspondería de acuerdo al número que les figura en el convenio adquirido. Sin embargo, a seis días de lo ocurrido y con una toma casi completa de las viviendas por adjudicar, hasta ahora ningún funcionario del IPPV, ni nadie vinculado al sindicato de los viales o a la cooperativa Sisvial se presentó para tomar contacto con los ocupantes, que permanecen en el interior de las casas que aún no cuentan con ningún servicio. “Hacemos esto para evitar que a partir de ahora cualquiera venga y se meta en las viviendas. Nos tendremos que quedar hasta que el IPPV se decida a adjudicarlas”, manifestó una de las vecinas. Según se informó el primero de los usurpadores fue notificado por la policía, que actuó de oficio tomando sus datos y los de su familia y dejó una consigna policial en las inmediaciones del barrio, pero se desconoce si la medida se hizo extensiva a los otros preadjudicatarios. Cabe recordar que de las 260 viviendas que los que firmaron convenios con Sisvial, Sansuerro se comprometió que las 146 se construirán en dos etapas. En la primera de ellas se levantarían las 86 que ya están culminadas y ahora deberían ser entregadas, mientras que en la segunda las 60 restantes, que según lo prometido se finalizarían y entregarían en 2012. Con respecto a las 114 restantes no existen precisiones acerca de su construcción. Hoy, el matrimonio que ocupó el primer domicilio posee como abogado a José Aphal, que también está brindando asesoramiento a otros preadjudicatarios. “La gente ha sido estafada, están especulando no sé por qué causa para adjudicar las casas, y lo van a hacer utilizando criterios que no fueron consensuados. Yo opino que no hay delito en lo que están haciendo los que ingresaron a las casas, ya que al tener todos el mismo derecho podrían haberlo hecho mucho antes”, manifestó el letrado.