Disco nuevo: ¿qué hace Piti Fernández por fuera de Las Pastillas?

Piti Fernández vuelve a la ruta, pero sin las Pastillas del Abuelo. Esta vez, sale solo. Y no podía ser de otro modo tratándose de su primer disco solista que además se llama “Conmigo mismo”, un trabajo sobre poesías de su abuelo con un sonido folk y country.

En paralelo a la banda, Fernández lanzó este disco casi familiar donde toma poemas del libro “Conmigo mismo” que lanzó su abuelo Francisco Betancor, quien tenía una fabrica de baterías para automóviles.

Para la composición y grabación, Piti trabajo junto a su primo Diego Betancor y sus sobrinos Mariano Fernández Seoane, a quienes se sumaron Luis Volcoff en teclados y producción, además de Guito Daverio, quien aportó su bajo y también estuvo en los controles.

El disco no significa un parate de las Pastillas del Abuelo, que el 7 de diciembre realizaran su tradicional kermesse en el Hipódromo de Rosario donde presentara su nuevo CD/DVD “Vivo” que salio editado por la multinacional Universal.

Sobre el trabajo con el disco y su visión del rock. Piti charló con Télam.

P- ¿Cómo surge esto? ¿Trabajando con amigos o familiares?

R- Surge porque con Beto, que es un taxista poeta con el que compartimos muchas autorías, generamos una canción para mi viejo y otra par a mi vieja en su cumpleaños de 70 años. Entonces, ya había dos canciones que iban a estar relegadas de Pastillas del Abuelo porque ya había una canción ahí para mi viejo y para mi vieja. Después hice otra para mis hermanos y otra con los cuentos que mi abuelo nos contaba de chico. Entonces, ahí ya había cuatro canciones para familiares que escapaban a la órbita de Pastillas. Se intuía ahí una obra conceptual en cuatro temas para familiares. Lo convoqué a mi primo que es productor, guionista y muy creativo y le dije de hacer un disco familiar. Mi primo es una luz y me propuso ir a buscar al libro del abuelo que había escrito hace 50 años, que se llama “Conmigo mismo” por una poesía que le da nombre y que posteriormente le dio el nombre a todo este trabajo. En ese libro que tratamos de imitar encontramos cuatro poesías que tenían que ver con el árbol genealógico, entonces teníamos 8 temas y aumentó la rapidez del disco. Después en dos o tres lunes generamos canciones de mi primo hacia mi tía, de mi primo que es mi padrino hacia mí, un sobrino me hizo una canción y yo generé otra, así que había un disco en menos de un mes. Todo se dio muy rápido, muy vertiginoso, y ahí es cuando le conté a los chicos: “pensaba hacer un disco en dos años pero está ahora fresco y no sé si esperar esto, total las canciones ya están”. Justo había un impasse por embarazo en la banda, entonces todo cerraba. Así nació.

P- ¿Cómo es el disco?

R- Este es un disco rutero, con folk y country. Me tomé el tiempo para hacer que también la musicalidad se diferencie de Pastillas, entonces hay tres guitarras electroacústicas que marcan el sonido de country, de folk y de rythm & blues. Acá todo el tiempo estoy con una guitarra, cosa que en Pastillas no, acá me pongo más parlanchín porque cuento la anécdota de cada familiar y en Pastillas cada vez hablo menos. También completo el repertorio con versiones de temas de los 60 y los 70, como quien quiere musicalizar el árbol genealógico de la familia y de nuestro rock. Este disco es acto psicomágico, como dice Alejandro Jodorowsky, poder estar componiendo con mi abuelo desde el más allá, una fiesta.

P- ¿Que te llevó a ese sonido?

R- Siempre fue lo que escuché de chico, y de hecho algunas cositas hay en Pastillas como El Country de la Soledad o Me Juego el Corazón, pero más eléctrico. Sí, desde que agarré Clapton Unplugged a los 12 o 13 años empecé a curtir más los remastered de Clapton y algunos temas bien country. De ahí me habrá ido a algunas cosas más country que tiene Vaughan. Y bueno, en una ruta no hay nada mejor que escuchar Creedence desde que uno es chico o Traveling Wilburys que lo conocí en la adolescencia. Siempre me cupo. Algunas cosas pude volcar en Pastillas, pero ahora con tres guitarras electroacústicas se marca más.

En paralelo a la banda, Piti lanzó este disco donde toma poemas del libro “Conmigo mismo” que escribió su abuelo Francisco Betancor, quien tenía una fábrica de baterías para autos.

“Desde que agarré Clapton Unplugged a los 12 o 13 años empecé a curtir más los remastered de Clapton y algunos temas bien country”.

revela Piti Fernández

sobre el sonido del disco.