Cine comunitario: hecho por vecinos de Neuquén para Neuquén y el mundo

Historias cinematográficas pensadas, escritas, filmadas y producidas por vecinos de los barrios de la provincia de Neuquén. Esa es la nueva propuesta que comenzará a desarrolarse a través del programa “Rodando la neuquinidad”, impulsado por la secretaría de Deportes, Cultura y Gestión Ciudadana e inaugurado en marzo de este año.

El junio pasado se presentaron dos películas con tintes localistas: “Apnea” y “Rubí Amancay”. El objetivo de esta propuesta es “fortalecer la producción local, promover el encuentro ciudadano y visibilizar contenidos con identidad neuquina”.

Y ahora van por más. Desde el viernes pasado se están dictando talleres de teoría audiovisual, que comenzaron en el biblioteca popular “Pehuén” del barrio Alta Barda de la capital neuquina.
Y seguirán ampliándose en otros sectores apuntando al desarrollo, rodaje y posproducciónde materiales cinematográficos.

En cada comunidad elegidas para ser parte del proyecto, se desarrollarán talleres sobres lenguaje audiovisual, escritura de guiones, planificación y técnicas de filmación, edición y montaje. Pero los cursos no se quedarán allí.

En el proceso los participantes podrán realizar sus propias producciones que serán proyectadas en una muestra abierta con fechas a definir más adelante y pasarán a formar parte de la “videoteca de la neuquinidad”, como archivo de memorias, vidas e identidad local.

“Se espera la formación de 12 grupos locales y la realización de al menos 18 cortometrajes comunitarios”, informaron desde el gobierno provincial. Lo que está buscando es que

Uno de los objetivos centrales es poder rescatar las historias orales, los sentires y vivencias de quienes son parte de cada rincón de Neuquén.Historias particulares, afines a todos que el día de mañana sirvan de material histórico para conocer desde otro lugar la conformación de la provincia patagónica.

“No se trata sólo de aprender a hacer cine, sino de revalorizar voces, paisajes y relatos: es una apuesta concreta por descentralizar la cultura y fortalecer el vínculo entre identidad, memoria y comunidad”, agregaron sus creadores.

El proyecto está dirigido al público en general. Pero apunta fundamentalmente a captar el interés de las personas adultas mayores, “reconocidas como portadoreas de la memoria viva de los barrios y localidades”.

Y como para seguir sembrando semillas, las producciones se difundirán en escuelas, festivales, radios comunitarias, centros culturales y plataformas digitales, garantizando su circulación y visibilidad en toda la provincia. El primer realizador que va a acompañar esta experiencia será Maximiliano Villar, de Vagantes Producciones.