Daddy Yankee y la fiesta que no fue

NEUQUÉN (AN).- El de Daddy Yankee tenía todo para convertirse en un buen show. Sin embargo, será recordado por los disturbios, piedrazos, decenas de heridos, niños asustados, autos rotos y un show que terminó abruptamente.

Unas 18 mil personas, muchos de ellos niños y adolescentes acompañados por sus padres, se dieron cita el jueves por la noche, en el predio del Casino Magic para ver por primera vez al rey del reggaeton. Otras cinco mil personas que no tuvieron posibilidad de ingresar, coparon la calle de atrás del predio, desde donde se podía ver el escenario.

Pero una hora después de iniciado el show, un grupo de veinte personas, según el recuento de la policía, intentó derribar un portón para acceder gratis al campo. Al ser resistido por la policía, el grupo comenzó a lanzar piedras hacia el interior del predio. El caos se generalizó y el personal de seguridad desalojó las tribunas del fondo. Daddy Yankee pidió varias veces «cordura», pero al ver que el descontrol aumentaba, decidió suspender su actuación.

Para los organizadores, sin embargo, el recital no se suspendió. «Duró una hora cincuenta minutos aproximadamente, ampliando incluso la hora y media prevista», dijeron. «Se despejó el área afectada, a través de las salidas de emergencia. Dado que el área de conflicto excede a la productora, solicitamos comunicarse con el Comisario Inspector Gerardo Escobar de la Dirección de Seguridad», informaron escuetamente en un comunicado.

Lo cierto es que hubo decenas de heridos por las piedras y las corridas. El servicio de emergencias que estaba en el lugar atendió a dos personas con heridas cortantes, según informó la productora del show.

Escobar, por su parte, consideró que «habrá que replantear el dispositivo de seguridad para el futuro. Si bien el lugar es lo suficientemente amplio para hacer este tipo de espectáculos, hay que hacer un vallado más amplio para evitar conflictos como estos».

La policía provincial destinó unos 70 efectivos para la custodia del interior y exterior del predio. A estos se sumó el personal de seguridad privada dispuesto por la empresa organizadora, Five Live Entertainment. Cuarenta uniformados se concentraron en la calle 12 de septiembre, donde estaban las cinco mil personas que no ingresaron.

Escobar, de la Dirección de Seguridad de la Policía provincial, que estuvo a cargo del operativo, informó que el número de policías fue el mismo que se utilizó para los show de Ricardo Arjona y Los Fabulosos Cadillacs, realizados, en el mismo lugar, y que convocaron quince y diez mil personas respectivamente.

Once uniformados y dos agentes de la seguridad privada resultaron con heridas y debieron ser trasladados para su atención a un centro de salud. Cinco autos particulares, cuatro móviles y dos motos policiales terminaron con abolladuras y roturas de parabrisas.