Dybala está muy cerca de sumarse a la Roma de Mourinho
El argentino, que quiere estar en el Mundial de Qatar, firmará un contrato por tres años y una baja cláusula de salida.
Paulo Dybala se convertirá en las próximas horas en jugador de la Roma por las próximas tres temporadas a cambio de unos seis millones de euros por año. El argentino, que salió de la Juventus y estuvo cerca de sumarse al Inter, se sumará a un equipo que jugará la Europa League, pero en el que tendrá desafíos interesantes. El jugador ya está en Faro, Portugal, con el equipo a la esperar del examen médico.
José Mourinho, el entrenador de la Roma, fue el que más insistió para concretar la llegada de Dybala. Llamó al jugador en repetidas vece y el fichaje del argentino sólo se entiende desde la insistencia del técnico y el prestigio que le da al club.
Los otros proyectos alternativos que podían encajar no eran tan sólidos e inmediatos para Dybala. El Inter le pidió al jugador que esperara, algo imposible para el argentino en el año del Mundial. El Napoles era atractivo deportivamente, por caso Champions League, pero no le permitía otras cosas, como una cláusula de salida baja.
La Premier League, con el Manchester United sobre todo era atractivo, pero como el Inter le pidió tiempo de espera. Por eso, el proyecto sólido que le ofrece la Roma bajo una propiedad estable, la de los estadounidenses de Friedkin Group, fue esencial.
La cláusula de salida terminó siendo decisiva. Dybala arriesga mucho en un club que sólo jugará Europa League, en un año en el que hay un Mundial en noviembre y en el que Paulo no puede esperar hasta setiembre para tener equipo.
Por eso es clave la baja cláusula de rescisión que la Roma le puso al jugador, que no superará los 20 millones de euros. Por lo tanto, si el club italiano no se clasifica para Champions de la próxima temporada, Paulo puede tener una salida fácil hacia un proyecto más ambicioso.
Lo otro que convenció a Dybala fue la promesa de que utilizará la camiseta con el número 10, que nadie se puso desde el retiro de Francesco Totti en 2017. Algo simbólico pero importante para el mundo del fútbol. lo que no es poca cosa.
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