Disparan con morteros en un paraje de Neuquén

Gentileza

Los proyectiles dejaron un cráter en la tierra. Los vecinos, atemorizados por la onda expansiva.

ZAPALA (AZ).- Dos proyectiles de 155 milímetros que fueron disparados con morteros por cadetes del Colegio Militar, cayeron ayer en plena noche y a escasos metros de viviendas particulares del paraje La Americana, ubicado a mitad de camino entre Zapala y Mariano Moreno.

El impacto de los potentes proyectiles no provocó víctimas, pero causó pánico entre los vecinos quienes denunciaron rotura de vidrios y rajaduras de sus casas.

Las detonaciones fueron a una distancia de entre 60 y 70 metros de las viviendas.

Fuentes castrenses aseguraron que los morteros fueron disparados por cadetes del Colegio Militar que realizan su adiestramiento en la zona (ver aparte).

Tomó intervención personal de la comisaría marianense con su titular Gustavo Arcidiago a la cabeza cuyos efectivos sufrieron las consecuencias de la onda expansiva que causó el segundo proyectil.

La causa está radicada en el juzgado Federal de Zapala a cargo del doctor Rubén Caro.

Mucho ruido

“Se sintió un ruido tremendo y reventaron los vidrios. Estábamos en la casa de mi madre y quedamos todos aturdidos sin saber lo que estaba pasando. Yo atiné a llamar a la policía y enseguida salimos afuera para ver que pasaba”, contó Julio Garrido, uno de los vecinos de La Americana afectados por este incidente.

En medio de la oscuridad, eran las 21:10 aproximadamente cuando sucedió el estallido, no alcanzaban a interpretar lo que estaba ocurriendo hasta que, unos minutos después, escucharon la llegada de otro mortero. “Corrimos para la casa nuevamente y ahí se escuchó una explosión fuertísima”, agregó.

Los integrantes del patrullero de la policía que había llegado para investigar lo que estaba pasando sufrieron en carne propia la magnitud del impacto. “La onda expansiva levantó prácticamente la parte de atrás del vehículo”, aseguró el comisario.

Arcidiago explicó que uno de los proyectiles fue hallado en un cráter a unos “60 ó 70 metros” de la causa de Juana Herrera, madre de Garrido. El otro, en tanto, apareció a unos 80 metros junto a rastros de la explosión y vainas detonadas.

“No sabemos la posición de los cañones, un rato después apareció un militar y cuando los efectivos, que ya había pedido el cierre de la ruta entre Zapala y Mariano Moreno, le explicaron la situación, ordenó el cese del fuego por handy”.

El lugar donde cayeron los morteros, de 155 milímetros, está ubicado a escasos 100 metros de la ruta 14.

Por fortuna no hubo que lamentar heridos entre los vecinos y tampoco se registraron víctimas entre los animales de la zona.