El déficit fiscal golpeó fuerte en febrero a raíz de la sequía

Los ingresos fiscales por retenciones a la exportación se desplomaron un 45% interanual en el segundo mes del año. Pese a la racionalidad que el gobierno viene aplicando en el gasto, comienza a complicarse la meta fiscal de 2023.

Los datos fiscales referidos al mes de febrero ponen por delante una nueva luz de alerta para la gestión de Sergio Massa al frente del Ministerio de Economía: a raíz de la sequía histórica que afecta al país, comienza a complicarse el cumplimiento de las metas fiscales de 2023.

La cartera económica dio a conocer en el día de ayer los datos fiscales referidos al sector público nacional, y la nota distintiva durante el segundo mes del año fue el crecimiento del déficit, tanto a nivel primario como financiero.

Desde que Martín Guzmán estaba al frente de la gestión económica y se firmó el nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, el gobierno de Alberto Fernández viene aplicando un fuerte recorte del gasto a fin de encauzar la ecuación fiscal al cumplimiento de las metas pautadas con el organismo.

En efecto el año 2022 culminó con los deberes cumplidos en tiempo y forma: Sergio Massa pudo exhibir ante los equipos técnicos del Fondo un sobre cumplimiento de las metas fiscales, que estipulaban un rojo del 2,5% del Producto Bruto Interno (PBI), mientras que el registro final mostró un déficit del 2,4%.

Para 2023, el objetivo es alcanzar un déficit fiscal del 1,9% del PBI al cierre del año. El cumplimiento de la meta empezó a complicarse en el primer bimestre, en donde la caída de los ingresos por derechos de exportación debido a la sequía, provocaron un crecimiento inesperado del rojo en las cuentas del Estado nacional.

La gestión de Alberto Fernández viene aplicando un fuerte recorte del gasto en el marco del acuerdo con el Fondo. No será suficiente. La sequía hizo que se desplomen los ingresos por retenciones en febrero.

Según el reporte del Ministerio de Economía, el Sector Público Nacional registró un déficit primario de $228.134,0 millones en el mes de febrero, y un déficit financiero de $485.590,9 millones.

El informe indica además que en el segundo mes de 2023 los ingresos totales ascendieron a $1.570.391, creciendo un 85,6% en relación a febrero de 2022. La magnitud del impacto de la sequía más grande en seis décadas que azota la Pampa Húmeda, redujo los derechos de exportación en un 45% interanual en febrero, y en economía proyectan que la pérdida de ingresos fiscales por este concepto podría trepar hasta los $200.000 millones durante el primer bimestre de 2023.

Agrega que si se excluyen los tributos relacionados al comercio exterior, el incremento del resto de los ingresos tributarios es del 105,1%. En efecto, el informe de Economía resalta que «los ingresos tributarios vinculados a la actividad económica crecieron 107,2% interanual por el lado del IVA y 99,3% por Impuesto a las Ganancias, mientras que las contribuciones a la Seguridad Social crecieron 106,9%».

En cuanto al gasto primario, el mismo creció un 95% interanual en febrero y alcanzó los $1.798.525,1 millones. Asimismo, el gasto de capital creció 246,6% respecto a febrero de 2022, como «reflejo de la aceleración de la inversión pública asociada a obras de infraestructura energética, vivienda y transporte», resaltaron desde la cartera económica.

Dato

$228.000
Los millones a los que ascendió el déficit fiscal primario del sector público nacional, durante el mes de febrero pasado.

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