La incertidumbre rodea la producción de arenas de cercanía de Río Negro para Vaca Muerta
La tendencia a usar arenas de Entre Ríos para el fracking golpeó a las canteras de Río Negro. Desde el Gobierno provincias aseguran que es una “tormenta” y que su utilización volverá por la suba de la demanda de la formación neuquina.
La incertidumbre rodea al mercado de las arenas de cercanía que provee Río Negro para el proceso de fractura (fracking) que diariamente es usado en Vaca Muerta para la producción de gas y petróleo.
El proceso de salida de YPF de sus canteras y plantas de Río Negro tras la decisión de su CEO, Horacio Marín, de utilizar las arenas silíceas provenientes de Entre Ríos, recordó lo dinámico que es la industria que se mueve alrededor de la formación neuquina de shale.
Para hablar del presente de las canteras de arenas silíceas de Río Negro hace falta ir unos años para atrás, hasta 2017, y recordar cómo nació el desarrollo en la región de este producto clave para la industria del shale, conocido como “agente sostén”.
Básicamente las arenas silíceas se usan en Vaca Muerta en el lodo de fractura que se inyecta y posteriormente para asegurar que fluya el gas y petróleo. Mientras más redondas, duras y puras, mejor realizan su función de dejar drenar el petroleo almacenado en la roca, a miles de metros bajo el suelo. Las arenas varían según su índice de porosidad.
Como recordó el secretario de Minería de Río Negro, Joaquín Aberastain, en un inicio se utilizaron arenas sintéticas (conocidas como bauxitas) para el proceso de fracking de Vaca Muerta, pero rápidamente se empezaron a usar arenas naturales provenientes de Chubut y Entre Ríos, en 2017.
El costo de transporte de estas dos provincias, ubicadas a 1.300 y 900 kilómetros, fue un factor determinante en el comienzo de la explotación de Vaca Muerta, de allí que paralelamente comenzó la exploración en Río Negro, para encontrar arenas silíceas al sur del Río Negro, en la zona conocida como el Bajo de Santa Rosa.

Entre 2019 y 2020 se produjo la explosión de las canteras en Río Negro. Las arenas de cercanía se usaron cada vez más en Vaca Muerta. Los pedidos de explotación llegaron a 700 solicitudes.
Pero desde el año pasado empezó a declinar la utilización de las arenas de Río Negro, que llegaron a representar el 40% del agente sostén de Vaca Muerta.
Aberastain cree que la producción de arenas silíceas en Río Negro afronta una “tormenta”, pero está confiado que por la demanda que se proyecta tendrá Vaca Muerta en los próximos años, su utilización volverá a niveles anteriores. “Van a ser necesarias”, afirmó.

En este sentido una proyección sitúa la demanda de arenas para fracking para 2025 en 5.850.000 toneladas, 30% más que las usadas el año pasado en la formación neuquina.
Aberastain puntualizó que su uso sigue firme por otras operadoras y también se la utiliza como “blend” con arenas de otro origen.
Además fue claro en remarcar que el producto que se extrae de las canteras de Río Negro cumple con las normas ISO y API para su utilización en el fracking.
“No hay información pública de que las arenas de Río Negro no sirvan”, remarcó Aberastain, en una velada respuesta a la áspera afirmación del CEO de YPF Marían, que en marzo de 2025 dijo que “no funcionan”.
Marín citó un informe elaborado en Tecpetrol, su anterior compañía, que señaló que “todos los pozos que fueron completados con arena de Río Negro, por lo menos tienen un 20% de pérdida de reservas.
Fuentes del sector destacaron esta semana que la decisión de YPF de usar arenas de Entre Ríos, que remeció el mercado de cercanía, es una decisión estratégica.
Entre 2019 y 2020 se produjo la explosión de las canteras en Río Negro. Las arenas de cercanía se usaron cada vez más en Vaca Muerta. Los pedidos de explotación llegaron a 700 solicitudes.
Por lo pronto hay un parate, como ejemplificó el encargado de una planta de Río Negro, que señaló que solo se están realizando tareas de mantenimiento y esperando que esta situación mejore.
Las arenas de Entre Ríos se caracterizan por su calidad y más allá del costo de transporte de traerlas en camiones desde 1.300 kilómetros, contra los aproximadamente 300 de Río Negro, una parte de las operadoras están apostando fuerte a sus virtudes.
Distancia
- 1.300 kms
- Entre 2019 y 2020 se produjo la explosión de las canteras en Río Negro. Las arenas de cercanía se usaron cada vez más en Vaca Muerta. Los pedidos de explotación llegaron a 700 solicitudes.

Otra fuente del sector petrolero neuquino, donde el tema se habla bajo pedido de reserva, remarcó que persiste el interés por las arenas locales. Y citó como ejemplo que se está evaluando la extracción en Neuquén, donde la cantidad de kilómetros a recorrer entre la cantera y las plantas de tratamiento para su posterior uso en los pozos, se achicaría considerablemente con su impacto en la ecuación final de producción.
Aseguran que la crisis de NRG tiene otro origen
Desde distintos sectores del ambiente petrolero regional se buscó aclarar que el caso de NRG Argentina, la proveedora de arenas para Vaca Muerta que entró en convocatoria preventiva de acreedores, no está relacionado directamente con la baja en la utilización de las arenas de cercanía que provee esta firma.
Según se remarcó, la crisis de la empresa con planta en el parque industrial de Allen, responde a los manejos financieros que realizo la empresa y a una proyección errónea de cómo evolucionaría el mercado de las arenas de Vaca Muerta.
En el medio, también hay que remarcar el impacto que tuvo en NRG la causa penal por presunta sobrefacturación de importaciones y lavado de activos por una cifra que rondaría los 80 millones de dólares.
En las condiciones señaladas, afirmó NRG en su escrito ante la Justicia Comercial de Buenos Aires que tramita la convocatoria de acreedores, que “desde el inicio mismo de las causas penales en junio de 2022, se le ha restringido -prácticamente se le ha imposibilitado- a NRG Argentina SA el habitual acceso a todo financiamiento bancario” para llevar adelante tanto el mantenimiento de maquinaria o simplemente cubrir gasto corriente (pago de salarios y proveedores) frente a los naturales periodos de menor facturación o retraso en los pagos de los clientes.
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