EE. UU. despeja dudas sobre el futuro del shale
Se espera una desaceleración de la actividad en el 2020.
Hace cuatro semanas que Dan Brouillette quedó a cargo de la Secretaría de Energía en Estados Unidos y reemplazó a Rick Perry luego de 3 años a cargo de la cartera.
El funcionario asumió de cara a un escenario diferente respecto a lo que fueron los últimos años de actividad en las principales cuencas no convencionales del mundo. Para el 2020 se espera un desaceleramiento en la actividad en los desarrollos del shale en Estados Unidos por una restricción de capital que impedirá sostener el ritmo mostrado hasta ahora.
Sin embargo, para Brouillette el auge del shale “tiene un largo camino por recorrer todavía”.
Las variaciones de mercado también están vinculadas a las mejoras en la tecnología de perforación.
Los precios son menos volátiles que hace una década y esto se debe al rol de Estados Unidos como productor importante.
En paralelo, la OPEP tampoco tiene el poder de hace unos años, el ataque a las instalaciones sauditas de septiembre generó una alteración en los precios que fue digerida rápidamente.
Por último, para Brouillette el único inconveniente al que se enfrenta el shale es a los candidatos que proponen la prohibición del fracking.
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