Construyen una sala de extracción de miel para productores de Bariloche
Funcionará en el Mercado Comunitario Municipal. Demandará una inversión de 3 millones de pesos que aportará el Gobierno de Río Negro. Se podrá usar por turnos y el Municipio quiere cobrar un arancel.
Las capacitaciones e intercambios que sostuvo en el último tiempo la secretaría de Producción, Innovación y Empleo del municipio con los productores apícolas de la región apuntaron a promover el crecimiento de la actividad pero chocaron siempre con el mismo obstáculo: la falta en Bariloche de una “sala de extracción” de miel.
Sin esa infraestructura es imposible cumplir con los parámetros del código alimentario y lograr un producto apto para llegar a todos los mercados.
El municipio decidió ahora dar ese paso y comenzó a construir su propia sala para ponerla a disposición de los productores y contribuir así a “la cadena de valor” de la miel.
La secretaria de Producción, Eugenia Ordóñez, dijo que la inversión es de 3 millones de pesos y se cubre con un aporte del gobierno provincial. La sala de extracción estará ubicada en dependencias del Mercado Comunitario Municipal, que funciona en un galpón cedido por el ferrocarril sobre la calle Vereertrbrugghen.
“Es una sala aséptica, toda en metal, con varias centrifugadoras donde se colocan los cuadros (de las colmenas) y carritos de lavado”, explicó. La construcción está en pleno proceso y fue encargada a un especialista de Córdoba, que ya instaló 17 salas similares en todo el país.
El objetivo a partir de contar con la nueva herramienta (que estaría disponible en tres meses) es aumentar la producción de miel elaborada en Bariloche, donde hay unos 40 productores, casi todos “micro”.
Ordóñez dijo que hasta ahora producían y comercializaban de modo “informal”, con métodos de extracción precarios, que no cuentan con habilitación. Explicó que la falta de una sala de extracción adecuada fue durante años “un cuello de botella” para la actividad.
Según Ordóñez, los apicultores tienen mucho interés en multiplicar su producción, pero “lo que dicen siempre es que para invertir y crecer se necesita una sala”.
La funcionaria señaló que la decisión de priorizar esta inversión se tomó luego de comprobar el potencial que tiene la miel producida en la zona, por su calidad y cualidades distintivas, que incluyen la ausencia de agroquímicos.
“Es una forma más de diversificar la matriz productiva de Bariloche”, dijo Ordóñez. Del proceso participan también el Senasa y el Inta, entre otros actores.
Según la secretaria, la capacidad de la planta permitirá procesar 40 cuadros por turno y está pensada con una mirada de mediano plazo, porque supera por lejos la capacidad actual de producción.
Los productores de miel podrán usar la sala por turnos y se les cobrará un arancel por el servicio o dejarán en pago un porcentaje de la producción, que el municipio podrá comercializar en el mercado comunitario. Es algo que todavía resta resolver.
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