El robo de energía le cuesta a CALF 1.200.000 pesos al año 6-4-03

NEUQUEN (AN).- CALF pierde 1.200.000 pesos al año por robo de energía, una cifra significativa que se duplica fácilmente si se le suman las pérdidas por causas técnicas en el sistema. Con este panorama y una situación complicada desde el punto de vista financiero, la licitación del servicio eléctrico en la ciudad significará el tiro de gracia para la cooperativa, porque puede perder la concesión, según explicaron delegados de la oposición. El escenario se presenta dificultoso para un oficialismo fragmentado políticamente y que no logra aunar voluntades hacia una solución. De hecho, a la reunión informativa de delegados convocada por el consejo de administración en la noche del viernes hubo asistencia casi perfecta de la oposición. De la Celeste oficialista concurrieron algunos, y de quienes lo hicieron partieron los únicos pases de factura a las autoridades. El encuentro abundó sobre el proyecto de marco regulatorio del intendente Horacio Quiroga, que entienden poco favorable a la continuidad de CALF como prestadora de energía. Por encima del consenso general contra la iniciativa, la reunión no cubrió las expectativas de la oposición que pretendía cerrar la jornada con un comunicado fijando posición común y que no fue elaborado por «conflictos internos entre los sectores de la Celeste», se dijo. La situación económica financiera está en riesgo, de modo que «si CALF se presenta a una licitación, pierde», confirmaron a «Río Negro» los referentes de la lista Azul, Daniel Tarantino y Julián Villar. El drenaje de energía por «colgados» representa para CALF entre el 8 y el 10% del total de la facturación cobrada efectivamente en 12 meses. El resto corresponde a pérdidas de energía, si bien se encuentra dentro de un rango considerado «normal» en el negocio eléctrico. En suma, CALF pierde alrededor de 2.400.000 pesos al año entre una cosa y la otra. El robo de electricidad en esta capital tiene como característica no ser un mecanismo propio de los barrios más pobres. Se extiende a zonas residenciales y al área centro, como en su momento fue el sonado «enganche» de la seccional primera del Movimiento Popular Neuquino. El suministro clandestino concluyó cuando la cooperativa cortó la conexión ilegal. En un contexto considerado adverso a CALF en una licitación, autoridades y delegados intentan persuadir a los concejales que rechacen el proyecto de marco regulatorio del intendente Quiroga. Advierten que su articulado saca del juego a CALF -» «incluso al EPEN», afirman- por prestar el servicio en otras localidades, una cuestión que la propuesta no admite. La otra y quizá más polémica es la que declara de uso y utilidad pública a los bienes de la entidad, lo que entienden como una pretendida cesión barata a un privado, pues «es más fácil amortizar un alquiler o un leasing que comprar» una estructura compleja. «El proyecto está hecho a medida de un grupo privado», afirmaron los referentes de la lista Azul, sin avanzar en precisiones pero resueltos a dar batalla. Tampoco comulgan con la creación de un ente regulador municipal porque significaría «más burocracia y la cesión del 1,5%» de los ingresos. Les resulta convincente, en cambio, impulsar un ente regulador de carácter provincial que fije un marco legal, reglas de control y de calidad para todas las prestadoras de energía en el territorio neuquino. En compensación, Tarantino y Villar destacaron que «CALF no subió la tarifa, recauda a valor 1 a 1 y las inversiones son a precio dólar». Desde el 30 de junio de 2002 -inicio del período contable- dijeron que la inversión en mantenimiento ascendió a 1.600.000 pesos.


NEUQUEN (AN).- CALF pierde 1.200.000 pesos al año por robo de energía, una cifra significativa que se duplica fácilmente si se le suman las pérdidas por causas técnicas en el sistema. Con este panorama y una situación complicada desde el punto de vista financiero, la licitación del servicio eléctrico en la ciudad significará el tiro de gracia para la cooperativa, porque puede perder la concesión, según explicaron delegados de la oposición. El escenario se presenta dificultoso para un oficialismo fragmentado políticamente y que no logra aunar voluntades hacia una solución. De hecho, a la reunión informativa de delegados convocada por el consejo de administración en la noche del viernes hubo asistencia casi perfecta de la oposición. De la Celeste oficialista concurrieron algunos, y de quienes lo hicieron partieron los únicos pases de factura a las autoridades. El encuentro abundó sobre el proyecto de marco regulatorio del intendente Horacio Quiroga, que entienden poco favorable a la continuidad de CALF como prestadora de energía. Por encima del consenso general contra la iniciativa, la reunión no cubrió las expectativas de la oposición que pretendía cerrar la jornada con un comunicado fijando posición común y que no fue elaborado por "conflictos internos entre los sectores de la Celeste", se dijo. La situación económica financiera está en riesgo, de modo que "si CALF se presenta a una licitación, pierde", confirmaron a "Río Negro" los referentes de la lista Azul, Daniel Tarantino y Julián Villar. El drenaje de energía por "colgados" representa para CALF entre el 8 y el 10% del total de la facturación cobrada efectivamente en 12 meses. El resto corresponde a pérdidas de energía, si bien se encuentra dentro de un rango considerado "normal" en el negocio eléctrico. En suma, CALF pierde alrededor de 2.400.000 pesos al año entre una cosa y la otra. El robo de electricidad en esta capital tiene como característica no ser un mecanismo propio de los barrios más pobres. Se extiende a zonas residenciales y al área centro, como en su momento fue el sonado "enganche" de la seccional primera del Movimiento Popular Neuquino. El suministro clandestino concluyó cuando la cooperativa cortó la conexión ilegal. En un contexto considerado adverso a CALF en una licitación, autoridades y delegados intentan persuadir a los concejales que rechacen el proyecto de marco regulatorio del intendente Quiroga. Advierten que su articulado saca del juego a CALF -" "incluso al EPEN", afirman- por prestar el servicio en otras localidades, una cuestión que la propuesta no admite. La otra y quizá más polémica es la que declara de uso y utilidad pública a los bienes de la entidad, lo que entienden como una pretendida cesión barata a un privado, pues "es más fácil amortizar un alquiler o un leasing que comprar" una estructura compleja. "El proyecto está hecho a medida de un grupo privado", afirmaron los referentes de la lista Azul, sin avanzar en precisiones pero resueltos a dar batalla. Tampoco comulgan con la creación de un ente regulador municipal porque significaría "más burocracia y la cesión del 1,5%" de los ingresos. Les resulta convincente, en cambio, impulsar un ente regulador de carácter provincial que fije un marco legal, reglas de control y de calidad para todas las prestadoras de energía en el territorio neuquino. En compensación, Tarantino y Villar destacaron que "CALF no subió la tarifa, recauda a valor 1 a 1 y las inversiones son a precio dólar". Desde el 30 de junio de 2002 -inicio del período contable- dijeron que la inversión en mantenimiento ascendió a 1.600.000 pesos.

Registrate gratis

Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento

Suscribite por $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora